Paradigma emergente

Cuando era niña siempre veía a las personas del pueblo en sus diferentes actividades, por ejemplo a las señoras que iban a los molinos a moler el nixtamal, a las que hacían las tortillas, a las que lloraban mucho por las golpizas que les ponían sus maridos, a las que se iban a la siembra, a las que se peleaban por el marido de otra mujer y a las que se escondían de los cobradores aboneros. Eracomún ver a los señores del rancho irse a su trabajo en su bicicleta o en su caballo, a los que se quedaban en su casa ayudando a su mujer a partir la leña para hacer las tortillas, los menos que eran quienes se quedaban a trabajar la tierra; pero a quien nunca me cansé de admirar era a. ¡Don Modesto, un señor como de unos 50 años!, que siempre, andaba fumando sus cigarros “Delicados” (lo séporque teníamos una tienda y yo le despachaba su cajetilla de cigarros) quien trabajaba en la iglesia, era el sacristán. Don Modesto: siempre andaba como serio, a veces triste y ¡Muy pocas veces, se le veía sonreír!
¡Ésta es la historia de Don Modesto!, con quién platiqué; cuando entré a la universidad: un buen día cambiaron al párroco, porque ya era muy viejo y tenía que llegar uno más joven. Elnuevo sacerdote necesitaba a un sacristán más joven también, así que un día llamó a Don Modesto y le preguntó si sabía escribir, don Modesto no se sabía, ¡Ni la “A” por el revés!
El sacerdote le dijo que iba a contratar a una persona que supiera: escribir y manejar la computadora. Esta noticia preocupó mucho a Don Modesto, el sacerdote le agradeció tantos años de haber estado al servicio de laiglesia y don Modesto al salir de la parroquia se sentía nervioso… preocupado no sabía qué iba a hacer, tenía una esposa y ocho hijos que mantener, buscó un cigarro para calmarse un poco, pero circunstancialmente, ¡No llevaba ninguno consigo!, encontró en una de las bolsas de su pantalón unas monedas y pensó en comprarse por lo menos un cigarro.
Caminó y caminó preguntaba en las pocas tiendas delpueblo por un cigarro pero solo le vendían la cajetilla y pues cómo no le alcanzaba se sentó bajo la sombra de un árbol a pensar un poco las cosas; y dijo “bueno, en este lugar nadie vende cigarros sueltos y entonces se le ocurrió tener un puesto ambulante, donde era la parada del camión, de varias cosas entre las que vendía cigarros sueltos; se dio cuenta que los clientes aumentaban así quedecidió tener más puestos ambulantes en otros lugares estratégicos de otros pueblos y de la ciudad de Orizaba. Sin darse cuenta Don Modesto iba aumentando su capital a tal grado que tuvo que acudir a un banco a abrir una cuenta para guardar su dinero. Mientras hacían los trámites para su apertura de cuenta el gerente le decía a don Modesto: ¿Cómo es posible que sin saber leer ni escribir usted hayaacumulado en gran capital? ¿Imagínese si usted supiera leer y escribir? Don Modesto con voz tímida contestó: “Si yo supiera leer y escribir seguiría siendo el sacristán de mi parroquia”.
La educación de las sociedades cambiantes está en una crisis existencial, reformas educativas han intentado subsanar los estragos que se ven de una manera notoria en los alcances insignificantes. Los facilitadorestienen el compromiso de innovar, estando en la constante búsqueda paradigmática de las teorías renacientes que permitan eficientar el proceso de co-construcción del aprendizaje.
Los facilitadores tienen la responsabilidad de promover el desarrollo de habilidades, competencias y valores que la sociedad nos demanda. Existe una ausencia de valores en toda su magnitud, de manera tal que hoy muy pocagente se quiere comprometer en la medida que se acrecienta la cultura ligth, de fácil comer, fácil, digerir y nada o casi nada nos beneficia. La parte medular de este ensayo responderá a la siguiente interrogante ¿Cómo vivir la vida desde una visión integradora y omnicomprensiva?

MI ENTORNO Y MIS CIRCUNSTANCIAS.
Es difícil cambiar al mundo o los sistemas políticos, educativos, culturales,...