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Fernando tiene 38 años y trabaja como remisero para una agencia en la zona de Olivos. Su turno es de 12 horas por día, 6 días a la semana y con franco los domingos. Consiguió que le den el francoese día porque ya trabaja hace 5 años en esa agencia y le dieron el gusto. Se levanta a las 5 de la mañana, se da una ducha, desayuna y entra a trabajar a las 6. Por la mañana a veces hace viajes aEzeiza o Aeroparque. Después a la tarde tiene trabajo en varios colegios de la zona. Tiene dos clientes fijos por el momento. Vuelve a su casa alrededor de las 18. Cena a las 21 y al rato se va a dormir.Prácticamente no tiene tiempo libre. Tiene muy poco tiempo para almorzar y pocas opciones. Cuando tienen tiempo con los compañeros se juntan en un bar a la vuelta de la agencia y almuerzan juntospero tienen que hacerlo rápido, al paso. Muchas veces no disfruta de sus almuerzos. Y además salir a comer hoy en día es caro. Fernando trabajó bastante tiempo en el turno de la noche pero esto leresultaba muy cansador. El tema de la inseguridad también influyo en su decisión. “A la noche hay menos laburo, sobretodo los días de semana. Es muy duro y estresante. Vivís a contra ritmo de todo el mundo.Ya me robaron dos veces a la noche, eso es un riesgo que tiene este trabajo.” El sueldo de Roberto es de $8.000 por mes. Vive con su mujer y tiene una hija de 5 años. Por el momento alquila unapropiedad y esto le cuesta para llegar a fin de mes y mantener a su familia. “Yo tengo una nena pero hay compañeros míos que tienen 2 o 3 hijos y si la mujer no trabaja se les haces muy jodido.” Un dato nomenor es que el auto que utiliza es propiedad de él y debe mantenerlo con su propio dinero. Me cuenta que no suele darse gustos como salir a comer afuera o ir al cine. Tampoco puede darse el gusto deirse de vacaciones a algún lugar y con suerte se puede ir a la costa unos 10 días a la casa de un familiar. Cuando le pregunto si le gusta su trabajo o si lo sufre, me cuenta que estar 12 horas...