¿Puede influir lo ominoso en la compulsión de repetición vinculada a experiencias traumáticas?

La práctica clínica con sujetos expuestos a experiencias abusivas o de violencia sistemática, me lleva a reflexionar sobre algunos conceptos que podrían ayudar a la comprensión de estas vivencias. En este sentido, nociones como compulsión a la repetición, trauma y lo ominoso, me parece que pueden ser necesarias de considerar en el abordaje terapéutico de estos pacientes. Lo que me propongoentonces en este ensayo, es brevemente recorrer y señalar posibles relaciones e inquietudes al respecto, sobretodo con relación a la pregunta ¿Puede influir lo ominoso en la compulsión de repetición vinculada a experiencias traumáticas?
Freud sostenía que los procesos anímicos estarían regulados por el principio del placer de manera automática, como proceso primario para la autoconservación. Por loque cada vez que surge una tendencia displancentera, se tendería a la reducción de la tensión, a través, de la evitación del displacer o con la producción de placer. Donde placer y displacer corresponderían a la cantidad de excitación presente y no ligada en la vida anímica, el displacer sería el aumento de esa cantidad y el placer su disminución. Sin embargo, llega a la disquisición de que “esincorrecto hablar de un imperio del principio del placer sobre el decurso de los procesos anímicos (…) en el alma existe una fuerte tendencia al principio del placer, pero ciertas otras fuerzas o constelaciones la contrarían, de suerte que el resultado final no siempre puede corresponder a la tendencia del placer” (1920, p. 9)
En este sentido, Freud descubre en la clínica y en transferencia, queexisten ciertas experiencias penosas y aciagos destinos que son reiterativos en las relaciones humanas, lo que viene a cuestionar su proposición de que los sujetos estamos orientados a experimentar placer en nuestra vida anímica como un principio automático, llegando a la conclusión de que habría algo más allá del principio del placer, que tendería a repetirse como una compulsión: “en vista de estasobservaciones relativas a la conducta durante la transferencia y al destino fatal de los seres humanos, osaremos suponer que en la vida anímica existe realmente una compulsión de repetición que se instaura más allá del principio del placer” (1920, p. 22).
Una primera disquisición de Freud sobre la relación entre el principio del placer y la compulsión de repetición, es que la segunda, comooperación inconsciente, actualiza vivencias donde emergen mociones pulsionales reprimidas, provocando displacer al yo. No obstante, Freud considera que no habría contradicción entre este displacer y el principio del placer, pues sería displacer para un sistema y satisfacción para otro, que permite conservar lo reprimido.
Sin embargo, una segunda reflexión, lo lleva a plantear de que también con lacompulsión de repetición, retornan antiguas vivencias que no proveen placer desde cualquier punto de vista, señala: “Pero el nuevo y asombroso hecho que ahora debemos describir es que la compulsión de repetición devuelve también vivencia pasadas que no contienen posibilidad alguna de placer, que tampoco en aquel momento pudieron ser satisfacciones, ni siquiera de las mociones pulsionalesreprimidas desde entonces” (1920, p. 20). Esta condición de compulsión, sería algo que no sólo ocurre a los neuróticos, sino un aspecto común a la humanidad, aunque en el psicoanálisis es en transferencia donde pude pesquisarse en mejor y mayor medida y también, desde donde puede trabajarse. Freud consigna, “la transferencia misma es sólo una pieza de repetición, y la repetición es la transferencia delpasado olvidado” (1914. p. 152).
Quizás, uno de los conceptos en que más claramente puede verse representada la noción de compulsión a la repetición, es en el de trauma.
En Freud, el cuerpo del humano, como “vesícula de sustancia estimulable” (Freud, 1920, p. 26), se expone tanto a la estimulación externa, como interna; existiendo una protección antiestímulo para los estímulos externos en el...