Reflexion

LLEVAR A DIOS A NUESTROS TRABAJOS

Harold Koontz como muchos otros escritores nos proponen la ética como un elemento sustancial del trabajo; hace algunos años ésta no era tan importante para una empresa o institución, o no la creían necesaria, el mito de la amoralidad en los negocios está ya superado y la ética empieza a ser asumida por los directivos y se percibe la necesidad de ir máslejos y descubrir la importancia de la espiritualidad en el trabajo.
Algunos creen que la ética empresarial, siendo necesaria, no es del todo suficiente pero la vida empresarial exige trabajar con un espíritu fuerte, arraigado en convicciones profundas. Se insiste en la importancia de descubrir el sentido profundo del trabajo directivo, con frecuencia bastante duro. Al mismo tiempo, se sugiere lanecesidad de no dejarse arrastrar por la acción y contemplar la realidad más allá de lo inmediato para descubrir su trascendencia; darse cuenta de que el trabajo no es sólo un medio para ganarse la vida y para hacer carrera, sino que encierra una vocación y una misión que desarrollar. Es también remarcable entender el valor del sufrimiento ante decisiones o situaciones difíciles y encontrar laenergía interior para afrontarlo con buen ánimo y sin perder la alegría.
Éstos y otros elementos son aspectos de una nueva tendencia que para muchos puede resultar tan sorprendente como lo fue la ética en su momento: incorporar espiritualidad en el trabajo. Esto es laborar confiando en que hay un líder que todo lo puede, y resuelve cualquier situación por difícil que sea.
Muchas empresas tienenhoy día como política, no mezclar espiritualidad con el trabajo, no se permite hablar temas espirituales, sin embargo, vemos como ejemplo en la gran mayoría de los centros hospitalarios existe una capilla y se da la oportunidad de realizar actos religiosos, porque se reconoce que sentir y celebrar a Dios cerca de los enfermos, es generar salud, paz y bienestar a éstos y a sus familiares, puesmuchos creen firmemente que Dios actúa por medio de los médicos y por lo tanto existen tantos milagros y sanaciones. Entonces porqué no dejar o permitir que sea Dios quien ilumine las mentes de quiénes rigen nuestros destinos en el gobierno?
Este ejemplo se debería implantar en cualquier empresa, sobre todo en aquellas de mayor expansión y que cuentan con gran cantidad de funcionarios, en muchasocasiones sometidos a las presiones cotidianas y su estado emocional cambia, los encontramos tristes, deprimidos, estresados, alterados, irritados y mucho más, lo que genera una deficiencia en sus labores muy perjudiciales para la empresa, dado que su rendimiento laboral, o la calidad de sus servicios jamás será el mismo en estas condiciones. Una buena espiritualidad lleva a las personas a serhonrado en sus negocios, a trabajar con entusiasmo y alegría y a tener una enorme preocupación social por los demás, convencida de que esto es una exigencia de la vida y no solo algo efectivo para cualquier empresa o institución. El sentido de la vida no es solo trabajar, sino trabajar sin olvidarse que existe un Dios que nos tiende una mano para guiar todo lo que hacemos.
Es una incógnitasaber cómo evolucionará esta tendencia, pero en vista de la realidad que se está viviendo actualmente en Costa Rica, me parece razonable pensar que en medio de este mundo materialista se está recuperando cierta sensibilidad espiritual y en lugar de minimizarla se debería incentivar en todo lugar donde exista un hijo de Dios que cree en El.
Es probable que no muchos administradores cristianosenfoquen su tarea con ese espíritu. Sería complejo enumerar las causas. Una de ella es, sin duda, que durante siglos no se ha dado al trabajo de los cristianos corrientes la importancia espiritual que comporta. Sin embargo, en las últimas décadas la espiritualidad del trabajo de los laicos ha recobrado un renovado vigor. Entre los pioneros de este giro es de justicia recordar al Beato José...