Schuster Politica Y Subjetividad.

SCHUSTER, Federico Luis.
“Política y subjetividad.
El desafío de la complejidad en las ciencias sociales de fin de siglo.” (

Agora Nº 6. Verano de 1997, págs. 153-163.

La globalización ya no es un dato adicional de nuestro tiempo, es un escenario imposible de eludir para la acción política en el fin del milenio. No se trata tampoco de un fenómeno sólo, y ni siqiuera primariamente,económico. Y no debiera ser igualado con la emergencia de un `sistema mundial´. Como dice Anthony Giddens (1994), la globalización tiene que ver realmente con la transformación del espacio y el tiempo. Se trata de lo que ese autor llama acción a distancia y su expansión en años recientes se relaciona con la emergencia de medios instantáneos de comunicación global y transporte masivo.
La globalización nosólo tiene que ver con la creación de sistemas de gran escala, sino también con la transformación de los contextos locales –e incluso personales– de experiencia social. Nuestras actividades cotidianas se encuentran crecientemente influidas por eventos que tienen lugar en el otro extremo del mundo. A la inversa, los hábitos de estilos de vida locales tienen impactos globales. La globalización no esun proceso singular, sino una combinación compleja de procesos, que actúan a menudo en sentidos contradictorios, produciendo conflictos, rupturas y nuevas formas de estratificación. Así, por ejemplo, la reaparición de los nacionalismos y la acentuación de las identidades locales están directamente ligadas a las influencias globalizadotas, a las cuales se oponen.
Dentro de este escenario, lasubjetividad se ha convertido en un eje de discusión de las ciencias sociales. Los sujetos colectivos del siglo pasado y primera mitad de éste se han desmoronado en identidades fractales, no fijadas a ninguna necesidad estructural. En este contexto, el desarrollo de la reflexividad social es la influencia clave en una diversidad de cambios que, de otro modo, parecen tener muy poco en común. Loscambios en los sistemas de organización industrial, las permanentes crisis de representación política o las demandas para la reconstrucción política, para la eliminación de la corrupción, así como el generalizado descontento con los mecanismos políticos ortodoxos, son en parte expresiones de la reflexividad social creciente.
Una sociedad globalizada resulta entonces compleja por varios motivos. Por lainterdependencia y la multiefectualidad de las nuevas relaciones espacio-temporales, por la reflexividad dominante, que instala la incertidumbre en el ámbito sociopolítico, por la desaparición de estructuras subjetivas fijas y predecibles, que permitan anticipar intereses, necesidades y comportamientos. Todo ello genera un nuevo desafío para las ciencias sociales de fin de milenio y pone enprimer plano a la política que, hoy en día, inunda el ámbito de lo social.
En este contexto, como decíamos, la pregunta por la subjetividad ha devenido hoy clave para las ciencias sociales. En el último cuarto de siglo, diversas tradiciones la recuperaron y replantearon en el contexto de los marcos de investigación. Frente a los modelos que hacían suyo el proyecto de la ciencia unificada y aspiraban atrasladar a las ciencias sociales el lenguaje y la matriz lógico-metodológica de las naturales, resurge en los años sesenta con fuerza el proyecto comprensivista, cuyas raíces hay que rastrearlas por lo menos en Dilthey y seguir su recorrido a través de los neokantianos alemanes, Weber y Schütz. Lo que esta tradición planteó, centralmente, es que la realidad social es un producto no sóloadjudicable a dimensiones materiales, sino, de manera muy importante, a dimensiones de sentido. Esto es, las presentaciones de los sujetos no son sólo un agregado de superficie del mundo social, sino que ocupan un lugar constitutivo de lo que ese mundo sea. Es precisamente por eso que la comprensión de las representaciones de los sujetos (esto es, de la reconstrucción de su sentido) aparece hoy como un...