Simon bolivar

UN SUEÑO CON BOLIVAR

Debió ser por esas cosas del Bicentenario, por esas noticias que uno cree que no ve o escucha pero que el inconsciente guarda para tejer sueños y ficciones. Viéndolo bien, elinconsciente es un gran director de cine. Sabe escoger muy bien sus actores y crea unas realidades que ya quisiera Hollywood. Por lo menos así son mis sueños. Aunque también cabe la posibilidad quedurante los sueños volvamos a tener alma de niño y nos creamos todo aquello que se nos muestra, ingenuamente, sin sabotear con nuestra lucidez esos “cándidos” momentos. En todo caso el tipo es genial:terror, drama, comedia, romance, todo lo puede. Si no juzguen ustedes este sueño mío donde Bolívar no era Bolívar. Bolívar era mi abuelo, o viceversa. ¿Cómo puede hacerse verosímil este dislate? Ya loveremos.

Para empezar, partamos de la base de que yo siento una doble admiración por las figuras de autoridad llámense Alejandro, César o Napoleón. Todos ellos han alcanzado una gloria memorablegracias a la fuerza de su carácter. Me interesa cómo desde su condición de individuos han sobresalido por encima de las masas. Su condición de héroes o capitanes pareciera emparentarlos con losdioses- primer momento admirable-, pero no, ¡son mortales!, como nosotros, y tarde o temprano cometen errores que viene a señalar un triste final para sus audaces vidas. Entonces aparece ese lado oculto desus vidas, lunares (mis preferidos), pequeñas anécdotas, noticias censurables que luego los mistificadores quisieran opacar.

De Simón Bolívar ustedes ya saben demasiado. En el colegio nos hacenescribir su biografía, se dice que nació en Caracas y que juró nuestra libertad en el monte sacro, en algún lugar de Italia y también nos lo hacen dibujar en carteleras con sus enormes patillas y suelegante uniforme de campaña, se conmemoran sus batallas, se estudia su correspondencia y se le compadece en su destierro voluntario y en su triste muerte en Santa Marta. Su célebre frase “He arado en...