Sobre un flan

Hay un capítulo de la serie estadounidense de animación Los Simpson en donde Lisa descubre que Jeremías Springfiel, fundador y prócer de su ciudad, es un verdadero fraude. La gente ha estadocreyendo, ha formalizado sus costumbres y construido su idiosincracia alrededor de un ídolo falso.

Es un día de fiesta en Springfiel, el pueblo se prepara para celebrar un nuevo aniversario de sufundación, desfile incluido.

Todo intento de Lisa por fundamentar la realidad de los hechos es cercenado como pecado mortal, y quizá por esto, en este caso, recibe el apoyo incondicional de su padre Homero.No obstante sale a la luz la verdadera esencia de lo que Jeremías representa y Lisa se halla de repente ante una disyuntiva: ¿Debe ser comunicada al pueblo la nueva realidad?

En pleno desfile,es reclamada la atención de la ciudadanía desde el mismísimo palco oficial y Lisa tiene que decidir:

“Jeremías es … Grande” fue la declaración de Lisa.

Muchos años antes, Infante Don Juan Manuel,protagonista importante de la sociedad estamental española del siglo XIV, escribe El Conde Lucanor, respondiendo a la “onda” literaria de la Edad Media eminentemente teocéntrica.

Dentro delconjunto de cuentos o narraciones que conforman el libro encontramos uno, que quizá hayan escuchado por su frecuente repetición de maneras muy variadas, se trata “DE LO QUE SUCEDIÓ A UN REY CON UNOSFARSANTES QUE TEJIERON UN PAÑO”.

Es una historia que, bien podríamos afirmar, posee un paralelismo con la narración expuesta en el mencionado capítulo de Los Simpson, no obstante, debiéndose hacer lasalvedad en cuanto a su dirección inversa: de las autoridades a la ciudadanía, pasamos a, del pueblo al rey.

Básicamente se trata de unos falsos tejedores de un paño mágico que solo podía ser visto“por aquel que era hijo del padre que todos le asignaban”. Por supuesto, con este paño se confeccionarían las más extraordinarias vestiduras para un rey entusiasmado a cambio de oro, plata y seda....