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LOS ORÍGENES DEL ENSAYO HISPANOAMERICANO
Si pensamos que la madurez del ensayo como auténtico género
literario se da en las literaturas europeas a partir del siglo xvm, un título
como el que propongo -El ensayo en la literatura colonial
hispanoamericana- puede quedar reducido a un simple enunciado casi
vacío de contenido. O, a lo más, a una pretensión difícil de probar. En
general,estos temores son fundados, si bien procuraré probar que algo hay
que lo respalde: lo suficiente como para justificar este estudio, no muy
común, y que completa, con las limitaciones explicables, el vasto panorama
de las letras hispanoamericanas durante los tres siglos coloniales.
En primer lugar, siempre me ha llamado la atención el escaso o nulo
interés que la crítica ha mostrado por estaforma genérica dentro de un
período tan extendido, y con todos los problemas ligados a los orígenes y
a una época literaria tan debatida como ésta. La prueba más evidente es la
que vemos en las historias literarias y antologías, donde difícilmente suele
incluirse como entidad propia una categoría llamada "el ensayo en los
siglos coloniales"'. En fin, quizás sea éste el momento oportuno paradecir
que, a manera de aclaración, no pretendo en estos párrafos grandes
descubrimientos, aunque sí testimonios que permiten una presencia
defendible, y digna de subrayarse.
1 Entre muchos ejemplos, valga el testimonio que representan dos obras meritorias
y de diferente concepción. La primera, en la medida en que yo, como colaborador,
puedo opinar, es la Historia de la literaturahispanoamericana (I, Madrid, 1982),
dirigida por el profesor Luis ÍÑIGO MADRIGAL. La segunda, es la antología del ensayo
hispanoamericano elaborada por mi buen amigo CARLOS RJPOLL y titulada Conciencia
intelectual de América (ver 3a. edición, Nueva York, 1974), maciza antología que
comienza con Andrés Bello y sigue con Sarmiento, Montalvo, Hostos, González Prada,
Martí, Rodó, Vasconcelos. HenríquezUreña y Alfonso Reyes. Diez autores en total,
centrada, claro, en los siglos xix y xx. Es cierto que el título fundamental del libro está
bien representado, si bien no podemos olvidarnos que el subtítulo dice Antología del
ensayo hispanoamericano. En fin, aun limitándome al título principal, no sería forzado
agregar precedentes del siglo xvm, aunque disten del relieve inaugural de Bello ...TH. XLVIII, 1993 LOS ORÍGENES DEL ENSAYO HISPANOAMERICANO 375
Siguiendo con las generalidades, quiero decir también que, en mi
recuento, me propongo evitar un peligro bastante frecuente en algunos
enfoques particularmente nacionales: me refiero a la incorporación de
obras que poco o nada tienen que ver con la materia estudiada, y aun con
la literatura. Precisamente, para dar un ejemplo hartoconocido, quiero
evitar el caso de la aún difundida Historia de la literatura argentina de
RICARDO ROJAS, cuyos méritos, en su momento, no niego2, donde la casi
simétrica composición de Los Coloniales (simétrica, o casi simétrica en
relación a las otras tres partes de la obra) nos muestra una copiosa serie de
autores y textos ajenos a lo esencialmente literario. Y eso que, por razonesfáciles de comprender, no hace falta ser aquí muy exigentes.
Admitimos (sería ciego negarlo) el papel que juega la iglesia, papel
preponderante, en el desarrollo cultural de aquellos siglos. Aún más, la
cultura de laépocaestáen sus manos. Y eso repercute -como hemos vistoen
la notable cantidad de autores que visten hábitos. Órdenes religiosas y
clero regular compiten con frecuencia entre sí, y nohace falta volver a citar
nombres propios y títulos de obras. Lo que quiero agregar es que, en
efecto, en los siglos coloniales encontramos, en latín y en español,
abundante cantidad de sermones, tratados, historias religiosas, cartillas
evangélicas ... Así como, en otro nivel, con contactos notorios, el tema
religioso da sello a obras líricas, dramáticas, épicas y relatos novelescos....