Trabajo aprendizaje para el financiamiento del desarrollo rural

LA ESTRATEGIA DE INTEGRACIÓN DE CADENAS AGROALIMENTARIAS EN MÉXICO

Adolfo Álvarez Macías ; Elizabeth Montaño Becerril ; Antonio Flores Macías1

1. Antecedentes
Como parte de la transformación política, económica y social que ha seguido México desde los años 1980, en el año 2000 se decidió un nuevo ajuste a la política agropecuaria, para lo cual se privilegió un enfoque alimentario, queimplico abandonar la visión sectorial para instaurar otra de cadena agroalimentaria o lo que oficialmente se denomina como sistema producto. En 2006, con el cambio de administración pública, se ha ratificado y profundizado esta visión de la acción oficial y, en esa medida, se han alineado la mayor parte de las iniciativas públicas y privadas.
El enfoque de política pública se ha promovido como unaforma de alcanzar la competitividad de conglomerados productivos y no sólo de empresas, de tal forma que se pueda competir frente a grandes grupos y países, que dominan los mercados nacionales y el internacional, así como la mayoría de las innovaciones tecnológicas. Para ello se asume el peso creciente de las relaciones comerciales globales, el paulatino retiro del Estado de la conducción de laeconomía y, la necesaria incorporación de la sociedad civil al diseño y ejecución de la política pública que persigue delinear un nuevo modelo de acumulación y de desarrollo.
Esta inclinación política ha permeado rápidamente y con fuerza en el agro mexicano, generándose un referente legal para su impulso, plasmado en la vigente Ley de Desarrollo Rural Sustentable (LDRS), promulgada en 2001, con laclara intención de elevar la competitividad y la equidad en el campo mexicano, que comprende una amplia participación de los productores y sus organizaciones.
Esta posición ha sido promovida por parte de todos los ministerios de la administración nacional, pero especialmente por la Secretaria de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Alimentación y Pesca (Sagarpa), bajo un acentuado proceso dedescentralización, llamado federalización, que supone una amplia participación de los gobiernos estatales y municipales, así como de los productores rurales, más una serie de agentes que participan en las cadenas como: comerciantes, procesadores y consumidores, la mayoría de ellos visualizados en un marco regional de acción. Así, se supone que estos actores serán capaces de ejecutar estrategiasacordes a sus características socioeconómicas y productivas y además, respecto a sus proyectos de desarrollo específicos, además de decidir acuerdos negociados colectivamente. En este sentido, se intenta modificar los sistemas de gobernanza en los sistemas agroalimentarios, intentando diseminar los efectos de poder o dominación y, a la vez, los beneficios.
Con el enfoque de integración de cadenasagroalimentarias se valorizan mecanismos como las relaciones inter-empresariales, la coordinación vertical, la interacción tecnológica y los objetivos compartidos, que son nociones fundamentales para que la competitividad se construya a nivel de cadena productiva y no a escala de unidad productiva o empresa.
A la par, con esta táctica se puede favorecer la construcción de concentracionesproductivas en cuencas o regiones con potencial productivo, para reforzar sinergias productivas y comerciales, además de aprovechar rentas de localización, entre otros aspectos relevantes. Ahora bien, para que una estrategia de esta naturaleza tenga viabilidad, se identifican varias condiciones, destacando la existencia o, al menos, la propensión de los actores hacia una cultura de cooperación y derelaciones contractuales, para buscar el bien común en una expectativa de mediano y largo plazos. Sin embargo, este requisito es en México más la excepción que la regla, dadas las notables asimetrías que persisten entre los actores que conforman las cadenas productivas, el bajo nivel de capital social y la débil capacidad de las instituciones para arbitrar y regular este tipo de interacciones.
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