Valor educativo del trabajo

Aceptado para su publicación en Novedades Educativas. Nº 207

El reconocimiento del valor educativo del trabajo. De la educación de las manos como precepto moral, a la acción como fuente de la conceptualización.
Martín A. A. Spinosa Sebastián Otero
“Juan Dos: Siempre hablan de un oficio los que espían sin conocer el oficio. Juan Uno: Y comen del oficio que espían.”

Javier Villafañe. JuanUno y Juan Dos.

Presentación.
Que el trabajo enseña resulta una obviedad, no lo es tanto el contenido de lo que este enseña como tampoco su valoración social. Menos aún resulta claro el alcance de aquello que se aprende en el trabajo y los vínculos con los que se transmite en otros espacios destinados exclusivamente a la enseñanza. Las discusiones en torno a estos temas exceden las fronteras delo estrictamente educativo y si bien forman parte de un debate de larga data en los ámbitos de reflexión académica y de políticas públicas en materia de educación, consideramos que su abordaje requiere de otros marcos interpretativos para comprender el carácter social, económico, político y cognitivo de la relación entre la educación, el trabajo y el saber. En este artículo nuestra intención escontribuir a abrir el campo de discusión señalando en particular algunas conclusiones a las que hemos llegado colectivamente como parte de nuestra tarea de investigación, de docencia y de participación en la construcción de políticas públicas en la temática 1 .

Nuestra actividad de investigación y docencia se desarrolla en el Área de educación y Trabajo del CEILPIETTE del CONICET así como en laUniversidad de Luján. Asimismo, hemos participado en la construcción de una metodología y una política de reconocimiento y certificación de los saberes del trabajo en el marco de la Agencia de Acreditación de Competencias Laborales dependiente de la DGCyE de la Provincia en los años 2006 y 2007. Es dentro de estos grupos de trabajo y reflexión en donde hemos podido en conjunto con otros compañerosconstruir buena parte de estas reflexiones.

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La acción y la palabra. Distintos tipos de saberes y de sentidos sociales. Una breve aproximación histórica.
La relación entre acción y lenguaje ha sido una preocupación constante en el pensamiento occidental abordada desde diferentes matrices disciplinares, las que si bien son diferentes en la construcción del objeto, no dejan complementarse.No desarrollaremos cada una en particular, pero es preciso situar el problema en la complejidad de las dimensiones en las que está implicado así como discernir los planos en los que el problema puede ser analizado (estructural, organizacional, psicosocial, cognitivo) teniendo en cuenta que los mismos requieren de metodologías y conceptos diferentes para su tratamiento, evitando los reduccionismospropios de su escisión. Desde una perspectiva educativa, la separación entre la acción social y la enseñanza fue el fruto de un lento proceso de institucionalización. La creación de espacios específicos para la transmisión del saber, distintos de la práctica social misma, no fue igual para todos los tipos de prácticas, como así tampoco para las diferentes clases sociales. En el caso particulardel trabajo, entendido como la actividad humana dirigida a la satisfacción de las necesidades, que conlleva en sí una dimensión productiva (en el sentido de transformación de la naturaleza y del objeto en general) y una dimensión formativa (en la medida que toda acción revierte sobre el sujeto de la misma transformándolo) 2 , fue recién con la industrialización que comienzan a separarse los espaciosde trabajo de aquellos destinados a la transmisión de los saberes ligados al mismo (Cartón 1985). Habrá que esperar no obstante, hasta la masificación de la organización científica del trabajo, para que la separación entre concepción y ejecución posibilite la radicalización de este proceso (Coriat, 2000; Braverman, 1983; 1984) Una cuestión central a dilucidar es qué enseña el trabajo, es decir...