Varela Propuestas Pedagógicas
Reforma Vareliana
Comienzos de la Reforma
Más allá de estos esfuerzos, con este panorama era evidente que el sistema de enseñanza requería
una profunda reforma a todos los niveles, pero particularmente en primaria, base de la construcción. En
1868 se constituyó la Sociedad de Amigos de la Educación Popular que realizó una intensa propaganda a favor de la reforma y contribuyó decisivamente a darle sentido de urgencia.
José Pedro Varela, opositor al régimen militar liderado por Lorenzo Latorre, aceptó sin embargo en 1876
el cargo de director de Instrucción Pública de la Junta Económico Administrativa de Montevideo, pero
con jurisdicción extendida a todo el país. Pese a las ácidas críticas de sus ex correligionarios, exigió total independencia y dio comienzo a una formidable obra reformista que se extendió entre 1876 y 1879,
y que transformó hondamente no sólo el sistema de enseñanza, sino al país.
Emisión del Decreto
Ley de Educación Común
José Pedro Varela, hombre joven pero de vasta cultura y con experiencia en el extranjero, había viajado
a Estados Unidos en 1867 y a Europa en 1868, conocía las experiencias educativas de algunos países
más avanzados en la materia, que adaptó y aplicó en Uruguay.
Hizo emitir el Decreto
Ley de Educación Común, por el que se creó la Dirección General de Instrucción
Pública, órgano colegiado que debía controlar y dirigir el sistema educativo en todo el país (ocupó
personalmente el cargo de Instructor General). En las capitales departamentales funcionaría a partir de
ese momento una Comisión Departamental de Instrucción Pública y un Inspector Departamental, que
debía ser un maestro titulado de tercer grado. Esta reforma administrativa dio al sistema de enseñanza
una considerable autonomía. El decreto estableció además el carácter obligatorio y gratuito de la educación primaria oficial, pero no el laicismo; contra la opinión de Varela, se estableció que la
enseñanza de la religión Católica fuese obligatoria en todas las escuelas públicas, excepto para
aquellos alumnos que profesasen otras religiones.
Aprobación y características del Decreto
Ley de Educación Común
La gratuidad y la obligatoriedad anunciaban un crecimiento exponencial del alumnado. Un decreto de
agosto de 1877 creó un impuesto para financiar la reforma educativa; y otro estableció la Dirección y
Administración General de Correos, cuyas rentas se destinaron al mismo fin. El 23 de septiembre de
1877 se aprobó el Decreto
Ley de Educación Común, que prescribió el régimen de concursos para la
designación de los maestros y su promoción en la carrera; estableció que todo niño entre 8 y 14 años
de edad debía concurrir obligatoriamente a dicha escuela, y se prohibió la actuación política de los
inspectores.
Por otras disposiciones legislativas se fijaron las condiciones de admisión de los alumnos en las
escuelas que pasaron a ser mixtas, se reglamentó el acceso a la carrera docente, se organizó el
sistema de exámenes y se prohibió rigurosamente toda clase de castigos corporales a los alumnos,
admitidos hasta entonces.
Se conformaron los programas de enseñanza, se crearon diez grados y se determinaron las asignaturas
que incluían “Labores de uso común”: lecciones sobre objetos y manejo de máquinas de coser y corte
para las niñas, que se sumaban a las clásicas Lectura, Escritura, Aritmética, Geografía, Gramática,
Composición, Historia, Teneduría de Libros, Derechos y Deberes del Ciudadano, Nociones de Filosofía,
Higiene, Física e Historia Natural, Gimnasia y Música, además de Religión y Moral.
La idea era dar a los alumnos ...
Regístrate para leer el documento completo.