Weber y los partidos políticos

Introducción:

Para Weber el partido político es “la forma de socialización que, descansado en un reclutamiento libre, tiene como fin, proporcionar poder a su dirigente dentro de una asociación y otorgar por ese medio a sus miembros activos determinadas probabilidades ideales o materiales”[1]
En su caracterización de los partidos políticos, Weber distingue entre dos tipo ideales:Partido de patronazgo, cuyo objetivo es llevar a los jefes a la dirección política, para que ellos distribuyan cargos públicos entre los miembros del partido;
Y partidos programáticos, que se propone conseguir la implantación de contenido político.
A partir de esto, analizaré a los partidos de mayor caudal electoral y presencia territorial a nivel nacional (Justicialismo en todas sus diferentesversiones, UCR, PRO, Coacción Cívica, PS) y demostraré que ninguno de estos partidos se acerca al tipo ideal de partido programático, sino que se trata, más bien, de partidos de patronazgo.
Me valdré de ejemplos empíricos para demostrar mi postura con respecto a los partidos seleccionados.
He considerado oportuno basarme en 3 partidos políticos, Justicialista, UCR y PS, ya que estos tienen unatradición política.
En el caso del Justicialismo, utilizaré como base ideológica los pilares políticos, económicos y sociales del peronismo y la no contemplación de estos, por parte del gobierno de Carlos Menem y Néstor Kirchner.
Con respecto a la UCR, tomaré La Declaración de Avellaneda como base ideológica y el atropello de estas por el inicio de las privatizaciones por parte del gobierno deRaúl Alfonsín.
En cuanto al PS, utilizaré su reciente propuesta ideológica, que será la clave fundamental de la distinción con los partidos expuestos anteriormente.
Al final del trabajo se expondrán las conclusiones a las que llegue, luego de la investigación con respecto a cada partido.

Desarrollo:

Uno de los pilares ideológicos del justicialismo, se basa en otorgar y reconocer derechosa los trabajadores, “Derechos y dignidad son dos elementos que definirán una particular relación entre la figura de Perón y la base social del peronismo, los trabajadores.”[2]
En el acto sindical de febrero de 1947, el Presidente Juan Domingo Perón proclamó por los derechos de los trabajadores, este discurso se materializó, en el decreto número 4865 del 7 de marzo de 1947. En el mismo seenumeran una serie de derechos como el derecho a trabajar, el derecho a una redistribución justa, el derecho a la capacitación, derecho a las condiciones dignas de trabajo, derecho a la preservación de la salud, derecho al bienestar, derecho a la protección familiar, derecho al mejoramiento económico y el derecho a la defensa de los intereses profesionales.[3]
Los derechos expresados en dichodecreto, posteriormente formaron parte el artículo 37 inciso primero de la Constitución Argentina sancionada el marzo de 1949[4].
Pero en la década de 1990, con la llegada del Menemismo al poder, las bases ideológicas del justicialismo sufrieron un giro de 360 grados.
Los derechos de los trabajadores, lentamente comenzaron a ser suprimidos. A principios del primer gobierno de Menem, sanciono laley 24013, la que permitía la incorporación de modalidades flexibles de contratación laboral, a plazo determinado y sin indemnización. Así comenzó a desvalorizarse las garantías laborales de un sector fundamental del justicialismo.
Pero la situación se agravo aun más, cuando en 1998 se sanciono la ley 25013 o más comúnmente conocida, como la Ley de empleo-ley de flexibilización laboral[5]. Enrelación a esto, el historiador Mario Rapoport expresó: “Una de las normas más significativas en materia de flexibilización laboral fue la Ley Nacional de Empleo, cuyos objetivos eran la regulación de las situaciones laborales en lo referente al trabajo ‘en negro’, la introducción de nuevas modalidades contractuales con plazos determinados y la fijación de topes indemnizatorios por despidos...