Adios

Adiós

-Escoge- dijo ella
-¿Qué?-titubeé yo
-eso, escoge, si de verdad te importo tanto, si piensas un poco en mi, te quedarías y seriamos felices, uno al lado del otro, pero tu quisiste esto,ahora elije.

Y eso fue lo ultimo que hablamos, no dije nada, sólo me paré del sillón, abrí la puerta de su casa y me fui tan desorientado como apenado, en serio creí que lo entendería, llega unminuto en el que crees que conoces de verdad a alguien, pero no es así ¿cómo puede ser eso posible si ni siquiera te conoces a ti mismo?

Han pasado tres días, aunque sólo me demoré dos en tomar mideterminación. El día demás lo ocupé en ponerme los pantalones para poder volver a hablarle.

La amo tanto, pero mi destino no está aquí, debo marchar, algo dentro de mi me lo pide, lo implora, no haynada más que me ate, salvo esto, lo que algún día me hizo tan feliz hoy me atormenta como una espina, ¿en qué momento las alas se convirtieron en esposas?. Dudo, pero ya estoy a una cuadra delparque, ella debe estar esperándome hace más de 20 minutos, no le gusta esperar, en eso sí la conozco.

Ahí está, parada, dulce, exquisita, sublime, hermosa como nunca, ¿vale la pena todo esto? Ahora mepregunto que pasaría si me quedo, junto a ella, una vida más que tranquila, quizás hijos, nietos y un jardín de tulipanes. Me trasladé por un instante a ese casi utópico pasaje de mi posible vida,pero no fue suficiente. Quizá, podríamos vernos muy felices, pero en el fondo, no es suficiente. Jamás sería suficiente para mí, para ella si, pero tampoco se merece vivir una mentira, nadie se lomerece.

Llegué, y Dios, como una maldición me pierdo en sus ojos color marrón intenso. Ahora si que no sé que hacer, auxilio… Nadie escucha, y es que en realidad no pretendo ser escuchado, por lo menosno por otras personas…

Fue una de las decisiones más estresantes de mi vida, lo juro, nunca antes había sentido ese sudor frío recorriéndome la espalda, el nudo en la garganta, la opresión el en...