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Planificación tras bambalinas del primer descenso en la Luna

“Base de la Tranquilidad llamando a Houston. El Eagle ha alunizado.” Todavía hoy, más de 30 años después, esas palabras excitan laimaginación. Para quienes presenciaron el primer descenso lunar el 20 de julio de 1969, esas palabras están congeladas para siempre en la memoria. Sin embargo, la parte de aquella hazaña que sedesenvolvió tras bambalinas hace que el éxito de esa realización nos parezca aún más increíble. Lo que pareció ser una operación sin tropiezo alguno, que funcionó a la perfección y de acuerdo con el plan, estuvoen realidad muy cerca del desastre.

Colocar a tres astronautas en las profundidades del espacio exterior y hacer después que dos de ellos abordaran una nave espacial y descendieran en la Lunaimplicó una cantidad increíble de planes muy detallados. Desde la cuenta regresiva hasta el despegue del enormemente poderoso cohete Saturn V, hasta las delicadas maniobras de la cápsula lunar, todos losdetalles habían sido planificados en forma minuciosa. ¡O, por lo menos, eso era lo que los técnicos y controladores creían!.

El primer indicio de que algo marchaba mal se produjo cuando NeilArmstrong y Buzz Aldrin iniciaron el descenso hacia la superficie lunar en la diminuta nave espacial Eagle, que era extremadamente frágil. Una alarma se activó: algo conocido con la clave 1202 (“doce cerodos”). La persona a cargo de vigilar el descenso del Eagle a su regreso a la Tierra, desde el Control de la Misión, recuerda: “Yo no tenía la menor idea de qué significaba el “1202”. Faltaban menos deocho minutos para tocar la superficie de la Luna, y la única persona del Control de la Misión que parecía saber el significado de la alarma era Steve Bales, un técnico de 26 años de edad. Durante untiempo que nos pareció una eternidad, todo el programa espacial esperó para ver si Bales decidía cancelar el descenso lunar. Finalmente, Bales determinó que el problema consistía simplemente en...