Antonio nariño
Cuando leemos la interpretación de aquel momento dela historia que hizo el General Nariño, tenemos que pensar en el presente y en el futuro de Colombia. Él dijo que cuando apenas se había dado la primera etapa de la independencia, por creerla ganaday por dejarnos seducir, la abandonamos y nos dedicamos a las pugnas entre nosotros, que terminaron llevándonos a la Patria Boba, que abrió sepulcros, llevó al cadalso a los gestores de la iluminacióny sacrificó lo que pudo ser una portentosa era de crecimiento. Que no nos pase lo mismo con la Seguridad Democrática, que por no consolidar lo alcanzado retrocedamos a esa Patria Boba, que nos haríaperder lo ganado para que corran de nuevo ríos de sangre.
Este año volvamos sobre el pensamiento del Libertador. Él entendió, como el mejor, la necesidad de la promoción de la economía para laatención de lo social, y la urgencia del monopolio de la fuerza por parte del Estado, porque la violencia sacrifica siempre al débil, como sucedió en Colombia durante tantos años, por obra de la guerrilla, elnarcotráfico, el paramilitarismo y ahora las bandas criminales.
¡Qué bueno volver sobre todo su pensamiento! Y sobre aquella carta a los legisladores reunidos en Ocaña, donde manifestó: “arrojadvuestras miradas penetrantes en el recóndito corazón de vuestros constituyentes: allí leeréis la prolongada angustia que los agoniza, ellos suspiran por seguridad y reposo. Un gobierno firme, poderoso, yjusto es el grito de la patria –y terminando aquel mensaje expresó–: Considerad, que la corrupción de los pueblos nace de la indulgencia de los tribunales y de la impunidad de los delitos. Mirad,...
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