Baudelaire Y La Dialéctica De La Metamorfosis De La Ciudad Moderna.

Baudelaire y la dialéctica de la metamorfosis de la ciudad moderna.



La modernización, que comienza con un redescubrimiento de la racionalidad del ser humano, se vuelve paulatinamente tangible en  una nueva configuración de la ciudad medieval.  Ésta metamorfosis que comenzaron a vivir las principales ciudades europeas, tienen como hito la creación de boulevares, y con ello una nuevadistribución física de sus habitantes. La ciudad moderna, que ahora se viste de adoquines y tiendas que son la manifestación estética del progreso, vino a reconfigurar no sólo la cotideanidad del ciudadano europeo, sino la subjetividad de la misma población y de la naciente producción cultural.

Este cambio, que promete al desarrollo como el proceso habría de generar el bienestar y la felicidad de todauna generación, provoca dialécticamente huellas en los distintos productos culturales que surgieron en la época. Así, todos los soportes fueron influenciados y al mismo tiempo configuraron la percepción de esta nueva época a la que se abría el mundo; la modernidad y el inevitable conflicto histórico entre el presente y el pasado.

Ningún proceso histórico está exento de polémicas. Y quizás unade las razones por las que la modernidad ha sido uno de los más conflictivos es, justamente, por las tensiones que provocó en los sujetos su implementación. Ya no se trataba de una revolución colectiva ni de un cambio en el régimen de gobierno, sino de paulatinos cambios frente a los que el sujeto se encontraba indefenso y carente de referentes.

El soporte evidente en que habría de manifestarsees en la literatura, y la poesía de manera más específica. La propia construcción y ampliación de nuevos espacios urbanos, el avance de este monstruo que es la modernidad, hicieron replantear las temáticas que la poesía necesitaba e intentaba plasmar.

La nueva configuración de la ciudad trae consigo una nueva percepción estética, donde existe una correspondencia entre olores, colores y tonos.En definitiva, la naturaleza poco a poco se retira del espacio público con ello de las subjetividades colectivas. En tanto, el poema ya no es posible a partir de la relación con la naturaleza como lugar y fuente normativa (Oyarzún, 2000).

Así es como paulatinamente comenzamos a apreciar en la producción cultural de la época, la presencia de la impronta urbana. Imágenes, ritmos, maravillas ymiserias se darán cita en uno de los mayores experimentos que comenzó a desarrollar la humanidad y que tiene como inicio el proceso de la Ilustración.

Y es así como también se denotan las contradicciones de la modernidad. Podría decirse que el mismo desarrollo reforzaba consigo los males que esperaba eliminar. O por lo menos con este proceso resultan más  notorios o acentuados. Porque es elespíritu crítico el fundante de la modernidad, el que la configura y le da sentido hasta el día de hoy. La paradoja del sistema que se alimenta por medio de un espíritu que es el mismo que la fundó.

El sujeto se encuentra ahora ante un centro urbano que, por una parte, reposa en un silencio abismal y, por otra, despierta a cada momento por la “monotonía del tiempo”, como diría Pablo Oyarzún. Nosencontramos en una ciudad de “dialécticas”, de paradojas que están siendo expresadas en la misma producción cultural.

Estamos también ante la “ciudad irreal”, en la época del sujeto, que se pone a prueba una vez que abandona a la naturaleza. Y en esa prueba él debe ser un héroe, puesto que la nueva forma de vida no avanza al mismo paso de las creencias divinas. Todo es nuevo e inesperado, y existenmuchas posibilidades de que la vida termine en tragedia.

En otras palabras, se puede decir que ya no existe una inspiración o iluminación que guíe a este nuevo hombre. Ahora están sólo él y la enorme y fría maquinaria de la modernidad. Ahí es donde entra uno de los poetas más destacados del siglo XIX, Charles Baudelaire. Para él, la modernidad es lo transitorio, lo fugitivo, lo contingente,...