Calidad ambiental

ETERNITY
MAGGIE SHAYNE

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RESUMEN DEL LIBRO:

Hace trescientos años, los buenos ciudadanos de Sanctuary creyeron que había una bruja entre ellos. Su nombre era Raven St. James, una mujer cuya belleza terrenal y encanto cautivador motivaban los rumores de brujería

Trescientos años atrás Raven St. James fue acusada de brujería. Solamente un hombre trató de liberarla del nudo dela horca - Duncan, el Ministro del pueblo, quién murió tratando de salvarla. Trescientos años después, la acusada de bruja, todavía vive y anhela su amor. Por fin, después de siglos de soledad, Raven ha encontrado a su preciado Duncan, renacido en el cuerpo de un hombre que no tiene recuerdos del pasado. Pero Raven sabe que el corazón no puede olvidar la pasión que compartieron, sus almas estándestinadas a estar juntas, pero cuando él despierta a la pasión de su vida anterior, despierta también el mal que los apartó. Ahora Raven y Duncan deben demostrar su amor para toda la eternidad....

La Bruja sobre la Colina

Sus ojos son negros, el mar a medianoche,
Su pelo, una nube de hollín
Su voz, los vientos de fantasía
Su corazón como fuego, orgulloso
Yo no podíaayudarla, sólo observarla
Mientras bailaba bajo la luna,
Ella giró, hechizó, conjuró
Cantó un canto místico
Ella se remontó en mi alma aquella noche
El cielo estrellado fueron sus alas
Murmuró secretos en mis sueños
Y habló de cosas sagradas
En mi mente, me hechiza
Su beso fue un lazo mágico
Su toque me dejó temblando
Y deseando ardientemente su abrazo
Los cielosobedecían cada uno de sus deseos,
Los elementos, sus órdenes
Ella esgrime un poder sobre mí,
Mi corazón descansa en sus manos
Por ella cruzaría el Universo,
Por ella nadaría el mar,
¿Pero qué querría una
encantadora de un simple hombre como yo?
Ella vino, y dijo: "Te amo,
Y probablemente, siempre lo haré"
Mi corazón, lo comprometí, por siempre jamás
A la Bruja sobre lacolina.

— DUNCAN WALLACE —

Primera Parte

Capítulo 1

Siempre supe que era una Bruja.
La definición de la palabra se ha ampliado desde entonces, y con razón, supongo. Hoy en día, cualquiera con la determinación de aprender y practicar el Arte de la Sabiduría puede llamarse a sí misma — y merecidamente — una Bruja. Pero en mis tiempos no había libros escritos para guiar a unbuscador, salvo los mismos libros de las Brujas, pero los grimoires( se mantuvieron en secreto. Antes, una era una Bruja sólo si había nacido como tal o había sido adoptada por otra Bruja. E incluso entonces a la joven no se le contaban todos los secretos. Algunos de ellos yo no los aprendí hasta mucho más tarde.
Mi madre fue una mujer sabia, una Bruja, y cuando yo era muy joven me enseñó lasformas de manejar el poder del sol y la luna y las estrellas y de la Naturaleza en sí. Y sobre todo, me enseñó la importancia de mantener todo lo que había aprendido en secreto. Porque el castigo impuesto a los practicantes del Arte en aquellos días era duro. Madre nunca me dijo cuán duro era. Lo aprendí cuando tenía veintiún años, en una lección tan cruel que su recuerdo aún perdura ardiendo en mimente, a pesar de que han pasado tres siglos completos. Y eso ocurrió porque por aquella crueldad fue cuando puse por primera vez mis ojos en Duncan Wallace.
La clave de la ruina de mi madre fue su bondad. Mi padre había muerto tan sólo un par de semanas antes, a causa de la peste contra la que la simple magia popular de ella no podía combatir. Muchas vidas se perdieron en nuestro pequeño puebloinglés en aquel brutal invierno de 1689, y quizá mi madre simplemente no pudo resistir el ver una muerte más después de tanto dolor.
De todas formas, fue Matilda, la hermana de mi padre, quien vino dando golpes a nuestra puerta aquella oscura noche invernal. Mirando boquiabierta el aspecto de la tía Matilda — pelo salvaje y salvajes ojos, y apenas una capa sobre sus hombros — Madre la hizo...