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El cuento de Ricitos de Oro.
Erase una vez una tarde , que Ricitos de Oro

fue a la playa a ver que encontraba, Cerca de allí,

había una casa muy bonita , y como Ricitos de

Oro era unaniña muy curiosa , se acerco paso a

paso hasta la puerta de la casita. Y empujo.
La puerta estaba abierta. Y vio que había unos baldes de pescado
Uno , era grande; otro, mediano; y otro,pequeño. Ricitos de Oro tenía hambre, y probo la

del pescado más grande mayor. ¡Uf! ¡Está muy feo!
Luego, probo del tazon mediano. ¡Uf! ¡Está muy

raro!! Después, probo del tazón pequeñito, yle

supo tan rico que se la tomo todo.
Había también en la casa tres sillas azules: una silla

era grande, otra silla era mediana, y otra silla era

pequeñita. Ricitos de Oro fue a sentarseen la silla

grande, pero esta era muy alta. Luego, fue a

sentarse en la silla mediana. Pero era muy ancha.

Entonces, se sentó en la silla pequeña, pero se dejó

caer con tanta fuerza,que la rompió.
Entro en un cuarto que tenía tres camas. Una, era

grande; otra, era mediana; y otra, pequeña.
La niña se acostó en la cama grande, pero la

encontró muy dura. Luego, seacostó en la cama

mediana, pero también le pereció dura.
Después, se acostó, en la cama pequeña. Y esta la

encontró tan de su gusto, que Ricitos de Oro se

quedo dormida.
Estando dormidaRicitos de Oro, llegaron los

dueños de la casa que era una familia, y

venían de dar su diario paseo la playa

ya que habían ido de paseo



El papa, grito muy fuerte: -¡Alguien haprobado mis pescados! la mama, gruño un poco

menos fuerte:

-¡Alguien ha probado los míos también! El niño pequeño

dijo llorando con voz suave: se han comido todos mis peces

La familia semiraron unos a otros y no sabían

que pensar.
Pero el niño pequeño lloraba tanto, que su papa

quiso distraerle. Para conseguirlo, le dijo que no

hiciera caso, porque ahora iban a...