Desigualdad y violencia
¿Es posible seguir siendo indiferentes ante el dolor de miles y millones de colombianos que han sufrido los embates de la violencia? ¿O simplemente no nos importa porque no nos ha tocado directamente?Debemos restituir nuestra dignidad, para curarnos del dolor, debemos rehusar los atajos de la impunidad, para hacer que la justicia deje de jugar a la escondida y empiece a cumplir por fin con el papel que como sociedad le hemos encomendado y sobre todo, para empezar a construir colectivamente iniciativas que garanticen la no repetición de esta historia de odio y violencia que nos ha estado y nossigue desangrando.
Haciendo un repaso por nuestra historia, enunciaré algunas de las víctimas que tristemente han sido protagonistas de la ola de violencia que desde hace mucho tiempo se desencadenó en el país, en el que la lucha por el poder ha dejado grandes derramamientos de sangre, que aún no paran y que muy seguramente la hemos vivido de alguna manera pero desafortunadamente, lamayoría de nosotros ya olvidamos, o simplemente somos insensibles ante tantos atropellos de los que el pueblo colombiano es víctima cada día. Según estadísticas oficiales fueron 43.553 colombianos que murieron asesinados en 1948 durante el gobierno de Mariano Ospina Pérez, 73.822 que fueron asesinados durante el gobierno de Laureano Gómez (1950-1953), y 10.563 que murieron durante los primeros años degobierno de Gustavo Rojas Pinilla. La vida y los proyectos políticos de Rafael Uribe Uribe, quien muriera asesinado a golpes de hacha en las escalinatas del Capitolio Nacional, Guadalupe Salcedo, líder de las guerrillas liberales del llano, acribillado por agentes de la Policía Nacional en la Avenida Caracas con Calle 12, luego de firmar un pacto de paz con el gobierno, Luis Carlos GalánSarmiento, creador del Nuevo Liberalismo, asesinado en el Parque Central de Soacha el 18 de agosto de 1989 por orden de narcotraficantes en alianza con reconocidos líderes políticos, Carlos Pizarro León Gómez, candidato presidencial de la AD-M19, asesinado por los paramilitares el 26 de abril de 1990 en un avión de la empresa Avianca en pleno vuelo, Jaime Pardo Leal, asesinado el 11 de octubre de 1987,Bernardo Jaramillo, asesinado el 22 de marzo de 1990, y de unos 4.000 integrantes de la Unión Patriótica más, quienes fueron víctimas de una campaña de exterminio que se gestó en los batallones, la cual contó con el respaldo de empresarios y ganaderos y fue ejecutada por “escuadrones de la muerte” integrados, como hoy está sobradamente comprobado, por miembros de la fuerza pública y unidades...
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