El 17,5 milímetros y las cámaras cinematográficas de gildo castro.

En la historia del cine nacional antes de la fundación del Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográfica en 1959, es evidente que desde la llegada al país del séptimo arte a través del francés Gabriel Veyre, las principales productoras y directores se concentraron en la capital del país, con algunas excepciones en Santiago de Cuba, Camagüey y Cienfuegos.
Sin embargo, en el empobrecidopueblo nororiental de Gibara, un mecánico desarrollaba una especial afición por el cine al margen de la industria y los renombrados realizadores de entonces.
Su inclinación por el cine y la mecánica, llevaron a Gildo Castro a fabricar su propia cámara motivado no sólo por las necesidades económicas, sino por el reto a la creatividad que ello representaba. Fue así como en la década del treintafabricó una cámara cinematográfica de dieciséis milímetros.
Tomando como referencia que nació en 1919, resulta aún más interesante su capacidad de inventiva, al fabricar una cámara como lo habían hecho los pioneros del cine y las grandes industrias.
A pesar de su muerte en 1984, algunos de sus amigos contemporáneos aún viven y en sus testimonios la describen como una cámara cinematográfica de16mms con caja de madera de 150 milímetros de ancho, cuyo mecanismo era activado a través de una manivela. La fabricación exitosa de su proyecto demuestra, además, el extraordinario conocimiento que tenía Gildo Castro del funcionamiento interno del mecanismo cinematográfico.
Aunque de la cámara ya no quedan restos, Gildo dejó una huella que constituye la más importante prueba de su existencia. Unade las películas filmadas por aquel artefacto aún se conserva, a pesar de encontrarse en un lamentable estado de deterioro. La película fue filmada en 1937, cuando Gildo tenía solamente 18 años, y refleja la ejecución de un baile en una de las sociedades para negros existentes en Gibara en la época, denominada Club Maceo.
La única referencia escrita sobre la cámara es la plasmada por otrogibareño, el Premio Cervantes de Literatura Guillermo Cabrera Infante, en el siguiente pasaje de su libro La Habana para un Infante Difunto:
Viviendo en el Vedado, por azar o por designio de dioses irónicos, nos habíamos mudado justamente en la cima de la loma (…) en que culmina la Avenida de los Presidentes, junto al monumento que domina los jardines centrales, a cuya augusta altura habíamos ascendidoun día para recordar el gibareño Gildo Castro y yo, escalando el pórtico pretencioso, académico, híbrido: clásico en su arcada pero rococó en los detalles. Mi primo Gildo, de visita del pueblo a comprar soldadores para su taller, recorrió conmigo los barrios de La Habana y nadie le pareció tan inaccesible como este sepulcro blanqueado a la memoria de todos los presidentes muertos.
“Mi primoGildo, que era un mago mecánico, había traído consigo una cámara de cine que él mismo había construido y encuadró tomas que nunca vi reveladas.
Esta alusión podría parecer confusa si se considera que Gildo fabricó más de una cámara de cine. Aunque el libro donde aparece la referencia fue escrito en 1979, Cabrera Infante emigró de Cuba en 1965 y no regresó más. Por ese motivo, no tuvo tiempo deconocer la otra. No es posible entonces que la cámara referida en el fragmento sea una diferente a la de madera de dieciséis milímetros.
A finales de la década del setenta, Gildo Castro se propuso la fabricación de una cámara cinematográfica de 17,5mms. Lograrlo constituía para él un triunfo en materia de innovación. No tenía noticias de que alguien más en el mundo hubiese hecho algo similar.
¿Quémotivó a Gildo Castro a semejante búsqueda? En aquel momento la tecnología cinematográfica había sufrido una gran evolución. Los principales formatos para el celuloide ya habían sido inventados.
Varias de las personas que lo conocieron, coinciden al afirmar que uno de los motivos planteados por Gildo era su temor a la escasez del material cinematográfico en algún momento. Había necesidad de...