El alquimista resumen

EL ALQUIMISTA

PREFACIO

El Alquimista es un libro simbólico, existen tres tipos de alquimistas: Aquellos que son imprecisos porque no saben de lo que están hablando; aquellos que lo son porque saben de lo que están hablando, pero también saben que el lenguaje de la Alquimia es un lenguaje dirigido al corazón y no a la razón. Y el tercer tipo: Aquellos que jamás oyeron hablar de Alquimia peroque consiguieron, a través de sus vidas, descubrir la Piedra Filosofal, alcanzar la Gran Obra no es tarea de unos pocos, sino de todos los seres humanos de la faz de la Tierra.

PRÓLOGO

El Alquimista cogió un libro, encontró una historia sobre Narciso. Un hermoso joven que todos los días iba a contemplar su propia belleza en un lago. Estaba tan fascinado consigo mismo que un día se cayódentro del lago y se murió ahogado, llegaron las Oréades -diosas del bosque- y vieron, un lago de agua dulce que era, en un cántaro de lágrimas saladas. Por qué lloras? -le preguntaron las Oréades. Yo lloro por Narciso, pero nunca me di cuenta de que Narciso fuera bello. -Lloro por Narciso porque cada vez que él se inclinaba sobre mi orilla yo podía ver, en el fondo de sus ojos, reflejada mi propiabelleza.

PRIMERA PARTE

Empieza cuando un muchacho que se llamaba Santiago, llegó con su rebaño frente a una vieja Iglesia abandonada. Hizo que todas las ovejas entraran por la puerta y luego puso algunas tablas para que no pudieran huir durante la noche. Extendió su chaqueta en el suelo y se acostó, usando el libro que acababa de leer como almohada. Aún estaba oscuro cuando despertó. Miróhacia arriba y vio que las estrellas brillaban. «Hubiera querido dormir un poco más», pensó. Había tenido el mismo sueño que la semana pasada y otra vez se había despertado antes del final. Se levantó y tomó un trago de vino, se había dado cuenta de que, cuando él se despertaba, la mayor parte de los animales también lo hacían. En los dos últimos días, algo que le preocupaba era: la hija delcomerciante que vivía en la ciudad adonde llegarían dentro de cuatro días. Sólo había estado allí una vez, el año anterior. La muchacha era hija del comerciante a donde llevaba a esquilar a sus ovejas, ella ese día, le dijo: -No sabía que los pastores fueran capaces de leer libros y él le respondió: Es porque las ovejas enseñan más que los libros. La moza le preguntó que cómo había aprendido a leer y élle dijo que yendo a la escuela, ella le dijo que sí sabía leer, por qué no era más que un pastor. El muchacho dio una disculpa para no responder. Se dio cuenta de que estaba sintiendo algo que nunca antes había sentido: las ganas de quedarse a vivir en una ciudad para siempre. Después de un rato llegó el comerciante e interrumpió la platica, esquilaron cuatro ovejas, le pagó y le pidió que volvieraal año siguiente y solamente faltaban cuatro días para llegar con el comerciante otra vez. Estaba pensando en explicar a la chica por qué un simple pastor sabe leer: había estado en un seminario. Sus padres querían que él fuese cura, estudió latín, español y teología. Pero el quería viajar. El padre no dijo nada más. Al día siguiente le dio una bolsa con tres antiguas monedas de oro españolas yle dijo compra tu rebaño y recorre el mundo. Y lo bendijo. Se sintió alegre al recordar esa conversación.
Miró al cielo y calculó que llegaría a Tarifa antes de la hora del almuerzo. «Es justamente la posibilidad de realizar un sueño lo que hace que la vida sea interesante», reflexionó al acordarse de que en Tarifa vivía una vieja capaz de interpretar los sueños. Y él había tenido un sueñorepetido aquella noche. Cuando llego con la vieja, le explico que había tenido el mismo sueño dos veces seguidas, soñé que estaba en un prado con mis ovejas cuando aparecía un niño y empezaba a jugar con los animales. El niño me cogía de la mano y me llevaba hasta las Pirámides de Egipto, el niño me decía: « Si vienes hasta aquí encontrarás un tesoro escondido.» Y cuando iba a mostrarme el lugar...