Estudiante

i‘’Cinco Panes de Cebada’’ de la autoría de Lucía Baquedano, oriunda de Pamplona, España.
Al concluir esta lectura, suspiré y a pesar de encontrarme sola, en ese momento, dije en voz alta: “¡Cuánto que aprender!” El libro narra la historia de la Joven maestra Muriel quien acaba de concluir  sus estudios de magisterio y ha sido promovida con excelentes calificaciones  al ganar el concurso  que lepermitiría ejercer su trabajo como maestra en el Ministerio de educación.
Muriel era una joven criada en la ciudad, y si bien no vivía con la abundancia del lujo que caracteriza a las jóvenes citadinas, tenía las comodidades de una urbana señorita.
Cuando ganó  el concurso, pensó que la enviarían a trabajar a una escuela grande, en el centro de una hermosa ciudad, pero no fue así, la enviaron aBeirechea, un pequeño campo perdido en las más recónditas montañas del pirineo Navarro.
Fue mucha la desilusión de la joven maestra.  ¿Y para esto tenía que tomar un examen tan riguroso?, se preguntaba. La escuelita estaba muy descuidada, pocos niños estudiaban y los que lo hacían era sólo hasta que pudieran rendir en las labores agrícolas. En aquella apartada, zona cada año escolar iniciaba conuna nueva maestra, pues las que iban al lugar se marchaban y no regresaban, puesto que sentían que no valía la pena trabajar en un lugar así.
Después de haber reflexionado y analizado cuál era su principal meta profesional, enseñar sin importar dónde, Muriel se decidió iniciando con el acondicionamiento de   la escuela, no fue fácil conseguir apoyo de la comunidad para esto, pero con granesfuerzo logró hacerlo. Luego, con la ayuda del sacerdote, visitó a los padres para garantizar que ningún niño en edad escolar se quedara sin ir a la escuela, Muriel estaba segura que el apoyo de la comunidad era fundamental para su labor, labor ésta bastante complicada, porque los moradores de allí estaban convencidos de que para el futuro de estas criaturas no era necesario estudiar, pues bastaba conque supiesen poner  a producir la tierra. 
Cuanto que aprender de esta joven maestra, pues cuanto más se le dificultaba su labor, más ideas brillantes se le ocurrían. Fue  así, que para vencer la apatía de los niños por la lectura se le ocurrió la magnífica idea de buscar donaciones para instalar en la escuela una biblioteca,  ¡cuánta proactividad! esto posibilitó que el panorama  fueracambiando, pues consiguió despertar el interés por la lectura, de los niños y hasta de algunos adultos. Logro este muy significativo, porque estos lectores entenderían que si se formaban, podrían hacer más eficiente su labor, cualquiera que ésta fuere.
Poco a poco, la maestra Muriel vio los frutos de su extraordinario esfuerzo y lo más significativo de su  primera experiencia profesional, fue ver cómo susalumnos decidían seguir estudiando, aunque esto implicara trasladarse a la ciudad.
Tan satisfecha estaba Muriel de su labor, que decidió irse a vivir a aquella humilde y apartada comunidad, donde después de algún tiempo se dio cuenta que valió la pena, el difícil examen del concurso y todas las vicisitudes que pasó para sacar adelante lo que había sido su primer proyecto escolar .
A veces,pensamos que nuestras acciones carecen de  significado, porque por más esfuerzo que hacemos, estos  no van a cambiar la situación de desigualdad social en que vivimos,  por tanto nos  desalentamos y perdemos el camino hacia nuestras metas de bien y colaboración con los más necesitados; pero cada quien desde el espacio en que le haya tocado trabajar tendrá mucho que aportar  en favor de la humanidad.Miremos cuan valioso fue para la maestra de nuestra historia, despertar el interés por los estudios de aquellas personas que veían la actividad educativa como algo inútil. En ese sentido, el inicio de un nuevo año invita a  reflexionar:
¿Cómo realizo yo mi trabajo? ¿Doy lo mejor de mí en procura de que este sea eficiente? ¿Qué me mueve a trabajar, ganar el dinero que necesito para vivir o ayudar...