Estudio comparativo

INTRODUCCION

La situación actual de los docentes es un tema bastante complejo, aunque no difícil de resolver, si así se lo quisiera, si existiera verdadera voluntad política para promover cambios sustantivos. Sin embargo, para no caer en una piñerización de la realidad, debemos admitir que tampoco es un problema actual, de este Gobierno o de los anteriores de la Concertación y se arrastradesde hace muchas décadas atrás, podríamos dar como fecha de inicio el día en que el mercado hizo su entrada triunfal en el sistema educativo, promoviéndolo y promocionándolo

Hoy no se sabe qué hacer para elevar los índices de la calidad educativa, no se sabe qué hacer para darle más y mejores herramientas a los docentes para trabajar en zonas vulnerables, de riesgo social. Así, con bajossalarios, en condiciones laborales desfavorables y sin ningún tipo de capacitación y/o perfeccionamiento en servicio (no en los meses de vacaciones), que aborde las problemáticas más recurrentes y comunes de la sociedad contemporánea (drogadependencia, sexualidad, delincuencia, etcétera y no únicamente saberes disciplinares), resulta imposible que los profesores sientan verdadero placer por el trabajoque desempeñan. Por idénticas razones, no todos quieren ser evaluados. Esto, la evaluación, hoy no debería ser materia de discusión: todos y cada uno de los docentes, de todas las especialidades, necesitamos ser evaluados para saber cómo enseñamos, cómo resolvemos, qué estrategias utilizamos, qué necesitamos a la hora de enfrentarnos con los grupos de aprendientes, qué expectativas tenemos sobreesos educandos, sobre nuestro trabajo en el corto, mediano y largo plazo, etc. Es decir, la evaluación es altamente significativa en tanto y en cuanto se preste para mejorar las prácticas educativas y conocer (y reconocer) los obstáculos para modificarlos. Diferente es cuando se la aplica para castigar o expulsar y no se dan posibilidades de cambio. Y es aquí cuando debe aparecer en escena la

paraque oxigene a quienes perdieron la brújula o no saben cómo continuar. Habrá que mejorar, entonces, con urgencia distintos sistemas de apoyo a la labor escolar.

Un docente puede ser muy bueno en su especialidad, un verdadero genio en lo suyo, pero no saber cómo enfrentarse a grupos de riesgo, porque no se lo enseñaron. En las universidades nos preparan para trabajar con alumnos ideales, nuncacon el mundo real, con la realidad de la calle. Muchos hemos aprendido “a los golpes”, porque nos interesa, porque nos gusta y amamos lo que hacemos o porque, simplemente, no tenemos otra cosa mejor. Y esa es parte de realidad de muchos.

Los gobiernos post dictadura no han sabido comprender la necesidad de tener un sistema educativo funcionando con docentes reconocidos como profesionales de laeducación, involucrados en todo momento con lo que acontece en las aulas, capaces y predispuestos a tomar decisiones en materia educativa, sabiendo que son ellos quienes más conocen la realidad de la escuela y que con ellos, como aliados, es posible revertir la crisis de equidad y calidad que vive hoy la educación. Pero también se precisa que, definitivamente, se mejoren los salarios docentes:urgente, mayor inversión en gasto educativo. Es esta la única manera posible de exigir por todo aquello que observamos como deficiente. Un docente que reciba buenos haberes por su trabajo, estará mejor motivado a promover cambios sustanciales y estructurales en sus prácticas educativas. Finalizando, los profesorados en las universidades, tanto privadas como tradicionales, con un nuevo curriculum,mucho más amplio y diverso, no pueden convertirse en las carreras por descarte, esas para no quedarse afuera; tampoco las pedagogías de las especialidades (Educación Musical, Bellas Artes, Educación Física, etcétera).

Otro punto muy importante es la ubicación geográfica, dotaciones ambiente, colores entre muchos dogmas que forman parte de nuestra cadena educativa en todos sus nivel; este es el...