Etica Y Educación

Introducción
Actualmente nos encontramos anclados en un contexto cultural caracterizado por la crisis de la modernidad. La modernidad vino a criticar a la antigüedad, donde el fundamento estaba dado en la naturaleza, es decir, se encontraba en la esencia de las cosas mismas. Con la modernidad ese fundamento se desliza hacia el sujeto racional, hacia el cógito, se encuentra en el acto mismo depensar del hombre.“El mundo moderno, como sabemos, buscó este fundamento en la certeza del cógito, en el discurso del método, en un uso legítimo de la razón pura, una vez que la crítica nos ha mostrado cómo funciona. La desnudez de los nombres, con respecto a las cosas, atrajo irresistiblemente, la fuerza y el poder del sujeto, de la razón, para poder “vestirlos” e “investirlos” de racionalidadsegura.” [1]
Sin embargo en la actualidad ese mundo moderno entra en crisis desde el interrogante acerca de que sí existe un fundamento. A partir de esto, varios autores han tratado de dar respuesta. Algunos proponen la vuelta al contrato, es decir, buscan reconstruir el fundamento, repensarlo como Habermas y Rowls. También encontramos una segunda línea de debate que propone la deconstruccióndel fundamento. La reconstrucción de verdades que se dan por supuestas para que emerja el acontecimiento, para que aparezca la diferencia. Son los autores de la sospecha, entre ellos, podemos citar a Foucault y Vattimo.
Surge además una tercera línea de debate que viene a criticar las otras dos anteriormente explicadas. La llamada filosofía de la alteridad que plantea el reconocimiento delotro en tanto otro culturalmente denso. Se piensa la inclusión de la alteridad, el trabajo con ella y no se intenta subsumirla. Siendo el máximo exponente de esta línea crítica Lévinas, seguido en sus planteos por Cullen.
Centrándonos en esta línea de debate actual, tomaremos al acto educativo como una práctica social discursiva fuertemente definida por su dimensión ético-política, en uncontexto de crisis del fundamento y los valores. Se hará hincapié en la diversidad y la alteridad en el acto educativo.
La importancia del reconocimiento de un otro culturalmente denso, vulnerable, frente al cual el docente debería asumirse como responsable. Para analizar esto se tendrá en cuenta los aportes realizados por Cullen en el texto: “El lugar del otro en la educación moral.”,situándonos en la importancia de la alteridad, criticando la ética de la diversidad y de la diferencia.
Tener en cuenta la importancia, además del deseo del alumno y poner en tela de juicio el poder del docente, el cual no debería convertirse en autoritarismo, queriendo imponer sus propios valores y visiones de la realidad. Buscamos que a través del diálogo el docente y alumno, puedan transformarsemutuamente. Debido a que gracias al reconocimiento del otro como diferente, el docente puede dejarse interpelar por ese otro investido por su deseo de aprender y habilitar así un espacio de pregunta y de conocimiento a través de diálogo. Así utilizando palabras de Freire “el enseñar no existe sin el aprender”, podríamos sostener que el educador debería estar abierto a la revisión crítica de loque sabe a partir de la actitud curiosa de quien desea aprender, ósea, el educando.
Por tal motivo será el tema fundamental de este trabajo: la relación ética educador –educando en el acto educativo, tomando a la educación como un complejo campo problemático que puede abarcarse en su riqueza a través del pensamiento crítico. El mismo se compone de tres racionalidades: la dialéctica, lahermenéutica y la ética.
Se analizará el tema haciendo un fuerte hincapié en el eje: “Los valores y las normas en la acción de educar”. Se intentará definir a la Ética, dentro de la Filosofía práctica, como: … “disciplina racional crítica y argumentativa que tiene por objeto, la pretensión misma de las acciones, o de obligaciones incondicionadas o de deberes frente a las normas. La ética es una...