Evaluación de centros docentes





EVALUACIÓN DE CENTROS DOCENTES





Asignatura: 05FA, Organización del Centro Escolar.
Profesora: Dolores Calderón Méndez, Facultad de Educación.
Alumna:



Universidad de Murcia, curso 2012-2013.
Índice:

Página
Justificación 3
La evaluación del profesorado 3
La evaluación de centros docentes 6
Referenciaslegales 7
El Plan EVA, sus antecedentes y los Planes Anuales de Mejora 15
El modelo de gestión de excelencia CAF 18
Plan Estratégico para la Excelencia de la CARM 19
Bibliografía 20
Justificación
Uno de los procesos de los que depende la calidad de la educación es la evaluación. Para mejorar es esencial conocer y valorar qué se hace y cómo se hace. Debería existirentre los docentes y el resto de la comunidad educativa una cultura de la evaluación como instrumento de aprendizaje, desarrollo profesional y de mejora de la institución escolar.

No son sólo las exigencias de calidad y de resultados lo que debería estimular una evaluación, sino que debería ser, por encima de todo, la profesionalidad de los docentes, con los siguientes objetivos: que elalumnado aprenda mejor (no que aprenda más), que el profesorado mejore su práctica profesional y tenga en cuenta la importancia del trabajo en equipo y que se contribuya a la mejora de las instituciones educativas donde trabajan.

La evaluación del profesorado
Según Mª Amparo Calatayud, la evaluación está en constante punto de mira y es uno de los mayores desafíos a los que se enfrentan losprofesionales de la educación en la sociedad actual. Hablar de evaluación supone en gran medida cuestionar la práctica educativa, pero está demostrado que una organización no puede avanzar sin evaluación.

En tiempos de crisis aumentan las políticas de evaluación. Según la autora “todo lo que no se evalúa, se devalúa”. Álvarez Méndez (2009) afirma que las políticas de evaluación que se están promoviendono nacen del interés por mejorar la práctica docente ni el desarrollo profesional del profesorado y que tampoco parecen interesadas en mejorar la calidad del propio sistema educativo. La principal preocupación es el aumento de su rentabilidad y su eficacia.

Tradicionalmente, la evaluación se ha centrado en el aprendizaje de los alumnos, pero últimamente y cada vez más se considera importanteevaluar al profesorado. Sin embargo, según Jiménez (2000), es un tema que trae consigo inconvenientes y dificultades como, por ejemplo, la falta de formación, la falta de tiempo, la falta de motivación o de interés, el exceso de individualismo, la carencia de apoyos y mecanización de las prácticas educativas, etc., por lo que aún resulta más compleja la evaluación de la docencia.

La sociedadactual, multicultural, diversa, mediática, técnica y globalizada, marca nuevos desafíos, entre ellos se encuentran la educación y la evaluación, con las nuevas competencias que se le reclaman al profesor en los ámbitos de la docencia y la evaluación. El profesional de la educación, además de diseñar escenarios, procesos y experiencias de aprendizajes significativos, ser experto en su disciplinaacadémica y guía del proceso de aprendizaje, centrado en el desarrollo integral del alumno, evaluador del proceso de aprendizaje del estudiante y responsable de la mejora del proceso educativo, ha de evaluar también su docencia y sus propias necesidades de aprendizaje, a través de procesos autoevaluativos que son la base para el crecimiento profesional y para hacer posibles la innovación y el cambio(Calatayud Salom, 2009).

En España, la evaluación docente es una realidad de escasa práctica, aunque se contemple en la legislación (LOE, artículo 106) y sea propuesta por expertos. Sin embargo, en países de nuestro entorno ya existe desde hace varias décadas una tradición de evaluación externa del profesorado, de rendición de cuentas (accountability), de eficiencia y eficacia del sistema...