Evaluacion Por Competencias
Si queremos que la evaluación tenga valor constructivo para los implicados en las acciones evaluadoras, es imprescindibleel conocimiento, análisis y debate conjunto de las evidencias que afloren durante el proceso de evaluación.
Ahora bien, aquí estamos ante un dilema de carácter ético difícil de resolver: por un lado,el derecho de los docentes a su privacidad y, por otro, el derecho público a saber; o sea, el problema está en cómo compaginar la preservación de la privacidad del profesor y la conveniencia de quelos estudiantes sean informados sobre algo que les atañe tan directamente como la acción docente de la que son parte esencial, no sólo como un derecho legítimo, sino, y sobre todo, como la únicaposibilidad de poder participar racionalmente en el análisis conjunto de las situaciones del proceso pedagógico que tiene lugar en las aulas y fuera de ellas.
La salida no está en optar por una posiciónextrema, sino en reconocer el proceso del desempeño docente como responsabilidad común de profesores y estudiantes que han de potenciar comunidades de aprendizaje mutuo. Desde esta óptica, la privacidadcomo mezcla de lo personal y lo profesional deja de tener sentido situándose el análisis de toda acción evaluadora en el ámbito público del aula, donde las responsabilidades y actuaciones son,inevitablemente, cooparticipadas y de dominio público.
Ello nos sitúa en la necesidad de precisar qué funciones debiera cumplir un proceso de una buena evaluación del desempeño profesional del docente:a) Diagnóstico: La evaluación profesoral debe caracterizar el desempeño docente en un período determinado, debe constituirse en síntesis de sus principales aciertos y desaciertos, de modo que le sirvaa la Autoridad, jefe de área y a él mismo, de guía para la derivación de acciones de capacitación y superación que coadyuven a la erradicación de sus desaciertos.
b) Instructiva: El proceso de...
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