Freud
Freudcomienza en su prólogo adelantando cuál será el tema de fondo: la felicidad. Al respecto señala: “ Uno no puede apartar de sí la impresión de que los seres humanos suelen aplicar falsos deseos; poder, éxito y riqueza es lo que pretenden para sí y lo que admiran en otros, menospreciando los verdaderos valores de la vida. Más en un juicio universal de esa índole, uno corre el peligro de olvidar lasvariedad del mundo humano y de su vida anímica”.
Con este comienzo Freud pone en evidencia que la felicidad es lo que busca alcanzar u obtener todo ser humano. ¿Qué será la felicidad? Para algunos la felicidad está en la riqueza, para otros en la salud, en la familia, etc. Dependerá en todos los casos de la subjetividad de cada ser humano. Pero como bien dice Freud tampoco es decirlo a la ligera,hay que tener en cuenta la variedad del mundo humano y de la vida anímica de cada ser humano, que está abierta a un sin número de posibilidades.
Otros de los puntos salientes de esta pequeña obra es el tema de la Religión, la analiza como una mera ilusión. Freud dice que los creyentes creen vivir una sensación de “eternidad”, un sentimiento “oceánico”. Para él no hay más sentimiento que el quenosotros mismos tenemos. En esta parte del libro Freud habla del Yo, Ello y Supéryo.
El tema de la religión es analizado pormenorizadamente por Freud a modo de ejemplo. La religión es una entidad del Supéryo. También creo que la religión pasa por una cuestión ideológica, y de cuanto puede llegar a afectar esa ideología en el ser humano.
Posteriormente Freud, analiza la vida anímica, alrespecto señala, “Que en la vida anímica no puede sepultarse nada de lo que una vez se formó, que todo se conserva de algún modo y puede ser traído a la luz de nuevo en circunstancias apropiadas, por ejemplo en virtud de una regresión de suficiente alcance”.
La religiosidad del hombre, donde él se representa en un padre de grandiosa envergadura. Y este Padre es Dios evidentemente. Este Padre esuna entidad del Supéryo. La religión hace creer al hombre que necesita de un ser superior que lo guié, escuché sus necesidades, que les de un premio y un castigo por su conducta. Todo esto es evidentemente infantil. El hombre en estos aspectos sobre la religión sigue siendo un niño.
Sobre la felicidad dice: “¿Qué es lo que los seres humanos mismos dejan de discernir, por su conducta como fin, ypropósito de su vida? ¿Qué es lo que exigen de ella, lo que en ella quieren alcanzar? No es difícil acertar con la respuesta. Quieren alcanzar la felicidad y mantenerla”, “Esta aspiración tiene dos costados, una meta positiva y una negativa: por una parte quieren la ausencia de dolor o de displacer; por la otra vivenciar intensos sentimientos de placer”.
Evidentemente Freud dice que el hombre...
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