Historia moderna y contemporanea - le goff
En el año 476, Odoacro, rey de los hérulos, depuso al joven RómuloAugustulo, emperador formal de occidente, que por entonces tenía15 años. El verdadero emperador era, primero, el de Bizancio: Zenón. Queda, en tanto que tal el hombre influyente en las intrigas regionales que eran, por entonces, los asuntos romanos.
Pasando al año 1492. Colón descubre América. La España cristiana toma Granada de manos musulmanas y concluye así la reconquista. Le Goff menciona una frasede Alphonse Allais: “¿Acaso sabía el hombre medieval que al dormirse el 31 de diciembre de 1492 despertaría el 1 de enero de 1493 en la mañana del renacimiento?
Le Goff entiende que un hecho histórico siempre lo construye el historiador. De la misma manera, los periodos también se construyen y más aun estos últimos. Nada nos indica que estamos entrando a una época o que salimos de otra. Segúnlo planteado, en la Edad Media entendían que el renacimiento era en espíritu, lo que esperaban los cristianos.
Le Goff plateo que la Edad Media no existía antes del final del siglo XVII y el Renacimiento no se constituye plenamente hasta el siglo XIX. A partir del siglo XVIII la Edad Media ya no es el período incoloro que pensaban estar viviendo los medievales, si no un periodo oscuro, atrapadoentre el pasado resplandeciente de la antigüedad y el futuro luminoso de los filósofos. Es un tiempo huero, caracterizado por la ausencia de razón y la ausencia de gusto.
Edad Media y cercenado de forma parentoria. Burckhardt se sirve de la antítesis. Opone la época de las tinieblas ese periodo, el Renacimiento que todavía no estaba claramente delimitado ni datado. Su libro la cultura delrenacimiento en Italia (1860), una gran obra a fin de cuentas, crea una división decisiva.
Una antigua palabra medieval, la palabra moderno, que significaba “reciente”, “presente”, adopta así un valor que había tratado superficialmente la disputa de los antiguos y los modernos a finales del siglo XVII y principios del siglo XVIII.
El siglo XIX. Responde a las necesidades de una enseñanza escolary universitaria en empacón. Esta enseñanza precisa fechas, marcos, puntos de referencia. Se quiere estructurar, algo que no es malo, pero esta estructuración nunca es inocente. La gran cuestión, entonces, no fue tanto asignar una fecha al fin de la Antigüedad como saber dónde parar la Edad Media e iniciar el Renacimiento, el mundo moderno.
En lo siguiente Le Goof dice: “el Renacimiento entanto como máquina de rebanar la Historia, sí lo es; el Renacimiento como momento de civilización no, ¡por supuesto que no! Al contrario, desde las obras de Edwin Ponofsky (1892-1968) –Renacimiento y renacimiento en el arte occidental (1960)-, todos los historiadores admiten que no hay un Renaciemnto, si no unos Renacimentos, y que la lógica misma de –renacimiento- resulta indisociable de lahistoria medieval”.
En tanto Jaguaribe plantea que la perspectiva nueva creada por el Renacimiento se basa en el desplazamiento del centro de gravedad del hombre a partir de su condición universal en su calidad de cristiano, en condición colectiva, como miembro de un burgo o una parroquia e incluso en su calidad heredada, ya sea noble o plebeyo, para pasar a una condición individual, en calidad depersona cuya vida será determinada predominantemente por su capacidad.
El hombre renacentista conserva su fe cristiana así como la creencia de que la Iglesia constituye el punto entre Dios y el hombre. Lo que diferencia su punto de vista del que se tenía en la Edad Media es que la religión ya no es más la reguladora universal de su conducta, y que se considera que la Iglesia ya no está dotada...
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