El autor señala lo perjudicial que puede ser la televisión para los niños y las futuras repercusiones que esto tendrá en su vida adulta. Desgraciadamente, la televisión, como la mayoría de losinventos, llegó para quedarse (al menos por mucho tiempo) y con esto se acentúa más el problema de la pasividad y la falta de interés de las personas por investigar y por leer. Tal vez uno de losmotivos por el cual se inventó la televisión haya sido para mostrar a la gente lo que sucedía en otras partes del mundo y las culturas de distintos países. Sin embargo, en la actualidad la televisióntransmite varios programas “de entretenimiento” de escasa calidad educativa para los niños y cuestionable contenido moral para los adolescentes (telenovelas, concursos de baile, películas, series,etc.) con la principal finalidad de ganar audiencia sobre otros medios de comunicación masiva (La radio y el periódico). Además, la televisión entretiene a tal grado que muchas personas se hanvuelto muy dependientes y hasta adictos a ella, al grado de que la encienden no para verla sino sólo para tenerla como una especie de compañía en sus casas (independientemente si estos individuostienen familia o viven solos); eso sin mencionar los numerosos establecimientos o negocios que cuentan con una televisión para que las personas no se aburran mientras esperan a ser atendidas. Y asícomo un ludópata sabe que los juegos de azar, a la larga, lo pueden perjudicar y de todas maneras permanece sentado frente a las máquinas de los casinos apostando, de manera muy similar el televidentepasa horas mirando la televisión sabiendo que, además de que es dañino, lo que se transmite no siempre es fidedigno y veraz.
Es de vital de importancia cambiar ciertos hábitos en los niños einculcarles el hábito de la lectura para evitar que se vuelvan personas pasivas y no sean como una persona que en cierta ocasión dijo: -Es que si no tengo la televisión es como si no tuviera los...
Leer documento completo
Regístrate para leer el documento completo.