La muerte de los Arango

LA MUERTE DE LOS ARANGO:
Una visión simbólica de la “simbiosis”
arguediana entre cristianismo y
animismo quechua
Ms. Jesús Diez Canseco Carranza
Córdoba 2003 – Trujillo 2011

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través del presente análisis, abordaremos algunos aspectos de la obra de
José María Arguedas (JMA). Para ello tendremos como eje La muerte de
los Arango, relato donde se enfatiza la relación existente entre símbolo(categoría hermenéutica), autor empírico-contexto, narrador y texto (categorías
semióticas).
Antes de continuar, cabe presentar a JMA como un individuo que vivió-absorbió
la cultura quechua de un modo que terminaría tornándola en el meollo de su
producción escrituraria y científica. Todo esto hizo del autor de Agua un ser capaz
de sentir, aprehender y expresar las manifestaciones más hondas ycomplejas
del pueblo andino. De allí que La muerte de los Arango sea no sólo un relato
meticulosamente construido sino también un documento antropológico de
importante valor. En virtud a ello, la obra de JMA constituye hoy, un paradigma de
la heterogeneidad histórica, social y cultural de América latina. Lamentablemente,
esta situación no se vislumbró como algo feliz en el itinerario vital del autorapurimeño. Muy por el contrario, apareció como una fuente de tensiones que
marcó su biografía desde edad muy temprana. Por un lado, como refiere Astvaldur
Astvaldson, debido a su aproximación a la cultura quechua, puede decirse que JMA
era parte sustancial de la comunidad mostrada en sus escritos. Sin embargo, debido
a su raza, educación formal y a las múltiples relaciones entabladas con la culturacosteña occidentalizada, nunca llegó a ser más que un intermediario entre dos
mundos disociados. Esto, indudablemente, desencadenaría una serie de conflictos
tanto en el hombre mismo como en su producción intelectual.
La muerte de los Arango es, pues, un relato donde se devela la biculturalidad de
un narrador intra-homodiegético.1 La voz de éste, pieza a lo largo de la diégesis,
diversos símbolos,teniendo como marco un mundo bimembre o transcultural,
prefigurado a partir de la dicotomía vida-muerte. En virtud a esta labor
narratológica, la enunciación “fluye” y se organiza de acuerdo a estrategias de
atestiguación directa y movimiento analéptico (retroceso temporal). Según Ángel
Rama, el autor empírico (JMA) accede a la realidad literaria, mediante fragmentos
de prosa lírica que, por elartilugio de una cosmovisión infantil verista, abre paso a
una cosmovisión mítica; en ella, la realidad es animada por ideas que sólo pueden
manifestarse bajo formas simbólicas. De otro lado, Antonio Cornejo Polar, teniendo
en cuenta que en más de una ocasión JMA manifestó ser un extraño en la urbe
costeña, refiere que en él, el sentimiento de desarraigo tiene el paradójico don de
preservar, conintensidad creciente, la memoria del tiempo y del espacio perdidos,
convirtiéndola en un segundo horizonte vital que se infiltra, y hasta modela, las
experiencias posteriores.

1 De acuerdo a la tipología de Gerard
Genette, nos encontramos ante este tipo de
narrador; es decir ante una voz que cuenta
su historia o parte de la misma -de la cual es
testigo directo- dentro de otra mayor o másimportante, vinculada al recorrido actancial
de los protagonistas.

La muerte de los Arango es un relato narrado en pasado.2 El narrador a su vez se
sitúa en un doble plano temporal pretérito: el de la peste o muerte que engloba a su
vez uno más remoto: el del progreso y la dicha.
Tras un preámbulo marcadamente simbólico, donde el tifus irrumpe como el jinete
que avanza “vadeando el río sobre un caballonegro”, aparece la voz narradora a
través de situaciones enunciadas, a la distancia, por un yo adulto. Ésta rememora
y simultáneamente presta sus facultades mnémicas y orales a un niño testigo que,
perdido entre la masa comunitaria, hilvana los acontecimientos tendidos entre los
ejes de la desolación y la bonanza.
Los actores del relato aparecen caracterizados de modo particular en cada plano o...