La mujer que miraba el amor atravez de una ventana

Solia dejarse mirar , caida la tarde, sentado enfrente de mi casa en el pequeño parque que era refugio de solitarios, como el. Siempre en la misma banca, siempre a la misma hora, siempre con la misma puntualidad, el mismo porte, inexistente sonrisa, mirada tranquila y algo que compartir le acompañaban, la mayor parte de las veces una taza de leche fría o un libro de alguna buena literatura.
Yohabía estado enferma desde hacia largos dos años, incapacitada en casa, con una rara enfermedad y con un temor de salir de ella mas grande que mis ganas de conocerle, pese a eso le había descubierto, como a mi mas grande hallazgo en los últimos cinco años , le miraba cada dia , desde mi gran ventanal satisfecha de tener el mejor lugar para contemplarle con la misma intriga , esperando un nuevomovimiento , pero siempre eran los mismos del día anterior, los conocía de memoria, podía jactarme de saber que hacia ese hombre entre las cinco y las seis de cada día.
Me pregunte su procedencia incontables veces, de donde a salido por que no le e conocido antes, había habitado en esa casa por largos 10 años y corrido en ese parque montones de veces años atrás y jamás había mirado sus ojos decerca.
Para el primer año de haberle encontrado sentado en esa banca, brinde desde mi ventana, y por un momento sentí que el también me miraba y crei ver una pequeña sonrisa, inmediatamente recordé los arbustos alfrente de mi casa que harian imposible el que el me mirase, pero seguí feliz, yo aun seguía viva y el aun seguía estando ahí, el que ya no estaba era mi corazón, se había mudado al parquey se negaba a volver con una terquedad que me comenzaba a inquietar.
Un día esperaba puntual su llegada y el no apareció, me asalto un miedo a no volver a mirarle, me levante de la cama, me recogí el cabello, me lave la cara y camine, soportando el dolor que no se compadecía de mi necesidad de mirar a aquel hombre.
Me sente en la banca por mas de una hora, cuando supe que no vendría, pesque unresfriado, tosi un poco, me sentí desconozolada, y unas pequeñas gotas inundaron mis ojos cuando alguien se me acerco y un pañuelo me dio, CB decía, lo tome y seque mis ojos y cuando volteé mire que era aquel hombre, que era real y que no le había imaginado todo este tiempo. Me sorprendía con una sonrisa que sabía ya había visto , se preguntaba el por que de mi demora en salir a hacerle compañíay se justificaba el no haberse acercado diciendo que pensó que era casada.
Desde ese momento el ya me sabia sola y gustaba de hacerme compañía, el también se sentía solo, le invite a venir a mi casa el siguiente día, sus visitas, atenciones y afectos, pronto se hicieron más frecuentes, como cubriendo una necesidad que alguien nos había dejado, y que ninguno de los dos jamás aceptaría, yonegaba mi enfermedad a mi misma desde ese día y por el tiempo que fuese necesario.
La relación evoluciono miradas encontradas, frases completadas, caricias compartidas, eran algo común con el progreso de los días.
Prácticamente Había mudado su banca del parque a mi casa y había incrementado el tiempo de una hora a incontables horas.
Cada despertar juntos, era una invitación a desear un nuevodía.
Momentos especiales compartidos, tardes lluviosas eran mis favoritas, noches frías para él, simples detalles que hacían todo idóneo te caliente para mí y leche fría para él.
De amigos a conocidos, de conocidos a amantes, y de amantes a una interrogante, no gustábamos de hablar de nada que no fuera el momento, solo sabía de él, lo que veía y lo que oía, y no preguntaba lo que no me decía, ni éla mí , asi pasamos cinco meses
Una tarde el no llego y su ausencia se prolongo, sentí pronto nuevamente el vacio que regresaba más que nunca reclamaba su lugar en mi corazón, y la enfermedad que le decía a mi cuerpo que no había desaparecido.
Mañanas, tardes y noches, números en en ascenso completaron un calendario que describiría como el más gris de todos los años.
Se habría enterado de...