La pedagogía de la indignación

LA PEDAGOGÍA DE LA INDIGNACIÓN

Paulo Freire, unos de los pedagogos más importantes del siglo XX, consideraba necesario educar a las personas oprimidas para el cambio social y para crearles una mayor conciencia de sus problemas y así aprendieran a hacerles frente, para que sean educados para la libertad. Todos debemos ser educadores y al mismo tiempo educandos.
Freire criticabaenormemente a aquellos que en su momento había mantenido un compromiso con los más necesitados y luego se vendían.
Hablaba de una educación humanizadora y por lo tanto liberadora la cual exigía tomar en serio los puntos, fuertes, conocimientos, experiencias, estrategias y valores de los miembros de los grupos oprimidos.
Sus escritos irradiaban aliento, esperanza y ánimo para no rendirse ante losproblemas del presente.
Las cartas pedagógicas están dirigidas a la familias, padres jóvenes, a los hijos e hijas adolescentes y a los profesores y profesoras porque su preocupación era; como el mundo cada vez más cambiante y más rápidamente, afectaba a las generaciones.
Nos hace un llamado a la urgencia de asumir el deber de luchar por los principios éticos más fundamentales como el respetoa la vida de los seres humanos, ríos, bosques etc.; decía no creo en el amor entre hombres y mujeres, entre seres humanos, si no nos hacemos capaces de amar el mundo.
El riesgo es un ingrediente necesario de la movilidad sin el cual no hay cultura ni historia.
De ahí la importancia de una educación que en lugar de tratar de negar el riesgo, estimule a hombres y mujeres a asumirlo como cuandoel profesor de pedagogía nos dice que tomemos riegos y generemos cambios dentro del sistema.
Paulo Freire nos dice que en la medida que nos hagamos capaces de trasformar el mundo, de poner nombre a las cosas, de percibir, de entender, de decidir, de escoger, de valorar, en último término, de eticizar el mundo; nuestro movimiento en él y en la historia envuelve necesariamente, los sueños porcuya realización, luchamos, pues no estamos en el mundo para adaptarnos a él sino para transformarnos.
Una educación progresista no puede en nombre de la disciplina castrar la altivez del estudiante imponiéndole un quietismo negador de su ser; pero tampoco dejarlo al libre albedrío porque se convierte en libertinaje.
Al ser vistos modos contradictorios entre sí operan en contra de la urgenteformación y el no menos urgente desarrollo de la mentalidad democrática entre nosotros.
No se trata de manipular la opción partidista, religioso o profesional de mis hijos; más bien de dar testimonio de respeto y amor por la libertad y lo más importante no es que ellos nos imiten sino, que reflexionado sobre nuestras huellas den sentido a su presencia en el mundo, pero no unas huellas de pasos depasos mal dados, en donde les digo les digo una cosa y doy testimonio de otras.
De la misma forma la educadora, el educador no puede pretender imponer sus ideas sino más bien dar las bases para que el educando sea una persona crítica, hombres y mujeres que ayuden a la elaboración del sueño de cambio del mundo. Pero no unas huellas, de pasos mal dados, en donde les digo una cosa y doytestimonio de otras.
Claro que no se puede luchar si no se tiene un mañana, objetivos, metas o sueños, sino se tienen esperanzas.
No importa si nuestros sueños son grandes o pequeños debemos luchar por ellos con el mismo afán y sin avergonzarnos.
Una frase que Paulo Freire repite constantemente en sus cartas pedagógicas era
“Cambiar es difícil pero no imposible” Una frase tan corta pero queencierra tanto.
Puede se que pensemos que nuestros sueños son difíciles de realizar, pero nos debe quedar bien claro, que no son imposibles, en el momento que así lo creamos nuestros sueños siempre van a tener la llamita encendida.
Cuando ese sueño se trata de cambiar el mundo, requiere de un esfuerzo mayor para creerlo, por supuesto estos no deben quedarse solo en un sueño, sino que debemos ir...