La valoración de la fotografía como un documento patrimonial a través del interés que posee la memoria sobre la realidad social y cotidiana.
La memoria es un hecho y un proceso colectivo. Laexistencia de un lenguaje y significación común a los miembros de un grupo hacen que éstos vuelvan a su pasado de manera colectiva, es decir dotado de un sentido compartido a los eventos que los hanconstituido como una entidad. La memoria histórica es una y se cierra sobre los límites que un proceso de decantación social le ha impuesto; la memoria colectiva es múltiple y se transforma a medida que esactualizada por los grupos que participan de ella por lo que “el pasado nunca es el mismo”.
Debido a la importancia que representa para la memoria ser un proceso colectivo pero a su vez un procesoen que se conserven los aspectos más importantes relacionados con la memoria histórica es que la fotografía se convierte en el documento privilegiado para conocer y comprender el patrimonio, paraacceder a él en tanto que en una fotografía se registran formas de pertenecía y adscripción a un determinado sistema cultural, unos modos de vida, un aprendizaje, un saber hacer y todo aquello querefleja la realidad social y la cotidianidad.
Toda ésta importancia como documento patrimonial fue evidenciada en un principio en el siglo XX por la prensa que usaba las fotografías en los diarios paraapoyar con una imagen descriptiva lo que sus artículos querían transmitir al lector, transformando así uno de los medios más importantes de comunicación gracias a una forma muy gráfica de relacionaruna noticia. Posteriormente y gracias al impulso que le dio la industria a la fotografía el hombre fue en su mayoría el protagonista de las fotos con el primer interés de obtener evidencias plasmadas enpapel que les permitiera darse a conocer por gran cantidad de personas o perdurar en la memoria para las próximas generaciones. Más adelante fueron los espacios los protagonistas de las fotografías...
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