La vida puede resultar dura

La vida a veces puede resultar terriblemente dura. Normalmente, todos tenemos algunos minutos de felicidad a lo largo de nuestra vida gracias al calor delas personas que queremos: pero cuando la vida te arrebata esas personas es imposible seguir viviendo, seguir adelante sin la persona a la que más quieres eneste mundo: una hija.
Voy a relatar su historia para que sirva de ayuda a otras chicas que se encuentren en la misma situación, que son capaces de hacercualquier cosa, incluso poner en peligro su vida, todo por un hombre del cuál están enamoradas.

Todo empezó un día de mediados de Enero en el que ella mecontó que había conocido a un chico. Me dijo que era militar, que tenía 22 años, que era de Ávila y que se llamaba José. Yo no le di la menor importancia, ya queella tenía 16 años y eso es lo más normal que puede pasarle a una chica de su edad y que con el tiempo se le pasaría.

Pero conforme iba pasando el tiempo,cada vez la notaba más rara, por lo que me decidí a preguntarle lo que le pasaba, me contó que hablaba todos los días con José, que él la llamaba y lemandaba mensajes, y además, que le gustaba mucho y que a él también le pasaba lo mismo, pero que no quería meterse en líos por estar con una chica menor de edad.Yo le dije que si él la quería yo no tenía ningún inconveniente en que estuviera con él, pero que lo que no quería es que le hiciera daño.

El 8 de Marzo,mi hija me dijo que José quería hablar conmigo, yo acepté encantada ya que tenía ganas de conocer al amigo de mi hija, del que constantemente me hablaba.