Las cronicas de narnia 3
Segunda edición, 1990
Tercera edición, 1992
© Originalmente publicado en inglés por
William Collins Sons & Co. Ltd.
bajo el título: The voyage of the “Dawn Treader”
Traducción de
MARIA ELENA PEREZ DE ARCE ARAYA
MARÍA ROSA DUHART SILVA
Distribución sólo para Chile
© C.S. LEWIS
© EDITORIAL ANDRES BELLO
Av. Ricardo Lyon 946, Santiago de ChileInscripción Nª 68.843
Se terminó de imprimir esta cuarta edición
de 5.000 ejemplares en el mes de octubre de 1993
IMPRESORES: Alfabeta
IMPRESO EN CHILE / PRINTED IN CHILE
ISBN 956-13-0728-5
C. S. LEWIS
LAS CRONICAS DE NARNIA
LIBRO III
“LA TRAVESIA DEL “EXPLORADOR DEL AMANECER”
ILUSTRACIONES DE
ALICIA SILVA ENCINA
COMENTARIO DE
ANA MARIA LARRAIN
I N D I C E
I ELCUADRO DE LA HABITACION 5
II A BORDO DEL EXPLORADOR DEL AMANECER 11
III LAS ISLAS DESIERTAS 18
IV LO QUE CASPIAN HIZO EN ESE LUGAR 25
V LO QUE LA TORMENTA TRAJO CONSIGO 31
VI LAS AVENTURAS DE EUSTAQUIO 36
VII COMO FINALIZO LA AVENTURA 44
VIII DOS ESCAPADAS MILAGROSAS 50
IX LA ISLA DE LAS VOCES 58
X EL LIBRO DEL MAGO 64
XI LOS ZONZOPODOS FUERON FELICES 70XII LA ISLA OSCURA 77
XIII LOS TRES DURMIENTES 83
XIV EL PRINCIPIO DEL FIN DEL MUNDO 89
XV LAS MARAVILLAS DEL ULTIMO MAR 96
XVI EL VERDADERO FIN DEL MUNDO 102
COMENTARIO de Ana María Larraín 111
I EL CUADRO DE LA HABITACION
ABIA un niño llamado Eustaquio Clarence Scrubb( y casi merecía ese nombre. Sus padres lo llamaban Eustaquio Clarence y sus profesores,Scrubb. No puedo decirles qué nombre le daban sus amigos, porque no tenía ninguno. El no trataba a sus padres de “papá” y de “mamá”, sino de Haroldo y Alberta. Estos eran muy modernos y de ideas avanzadas. Eran vegetarianos, no fumaban, jamás tomaban bebidas alcohólicas y usaban un tipo especial de ropa interior. En su casa había pocos muebles; en las camas, muy poca ropa, y las ventanas estabansiempre abiertas.
A Eustaquio Clarence le gustaban los animales, especialmente los escarabajos, pero siempre que estuvieran muertos y clavados con un alfiler en una cartulina. Le gustaban los libros si eran informativos y con ilustraciones de elevadores de granos o de niños gordos de otros países haciendo ejercicios en escuelas modelos.
A Eustaquio Clarence no le gustaban sus primos, loscuatro Pevensie —Pedro, Susana, Edmundo y Lucía—. Sin embargo, se alegró mucho cuando supo que Edmundo y Lucía se iban a quedar durante un tiempo en su casa. En el fondo le gustaba mandar y abusar de los más débiles; y aunque era un tipo insignificante, ni siquiera capaz de enfrentar en una pelea a Lucía, ni mucho menos a Edmundo, conocía muchas maneras de hacer pasar un mal rato a cualquiera,especialmente si estás en tu propia casa y ellos son sólo visitas.
Edmundo y Lucía no querían por ningún motivo quedarse con sus tíos Haroldo y Alberta. Pero realmente no lo pudieron evitar. Ese verano su padre fue contratado para dictar conferencias en Norteamérica durante dieciséis semanas y su madre lo acompañó, pues desde hacía diez años no había tenido verdaderas vacaciones.
Pedroestudiaba sin descanso para un examen y aprovecharía sus vacaciones para prepararse con clases particulares del anciano profesor Kirke, en cuya casa los cuatro niños tuvieron fantásticas aventuras mucho tiempo atrás, en los años de la guerra. Si el profesor hubiera vivido aún en aquella casa, los habría recibido a todos. Pero, por diversas razones, se había empobrecido desde aquellos lejanos días y ahorahabitaba una casita de campo con un solo dormitorio para alojados.
Llevar a los otros tres niños a Norteamérica resultaba demasiado caro, así es que sólo fue Susana. Los adultos la consideraban la belleza de la familia, aunque no una buena estudiante (a pesar de que en otros aspectos era bastante madura para su edad). Por eso, mamá dijo que “ella iba a aprovechar mucho más un viaje a...
Regístrate para leer el documento completo.