Liderazgo

Declaración de los Líderes Religiosos para las Cumbres del G8 y el G20 del 2012
Nosotros, los líderes religiosos de las naciones del G8 y el G20, nos hemos reunido previo a las
Cumbres del G8 y el G20 del 2012. Nos reunimos en un espíritu de pluralismo, proclamando la
paz y la igualdad. En una época tumultuosa de violencia e inestabilidad económica, nos
reunimos para proclamar lo mejor decada una de nuestras tradiciones, ofreciendo reflexiones
y recomendaciones a los líderes del G8 y el G20.
A medida que la fecha límite del 2015 para los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) se
acerca críticamente, las reuniones del G8 y el G20 son de vital importancia para cientos de
millones de vidas en todo el mundo. Ofrecen la oportunidad de mirar más allá de los ODM en
curso, a lapróxima generación de objetivos mundiales inspiracionales. Nos encontramos en
una coyuntura en donde las decisiones políticas, humanitarias, militares y económicas de los
países del G8 y del G20 tienen poderosa influencia sobre las vidas y el bienestar de una
multitud incalculable.
Nos hemos reunido en Washington DC, en la víspera de la 38ª Cumbre del G8 prevista a
reunirse en Camp David, Maryland,EE.UU. Miembros de las comunidades bahá'í, budista,
cristiana, hindú, jainista, judía, musulmana, sintoísta, sij y zoroastriana se han reunido aquí
para continuar el trabajo que fue hecho por los líderes religiosos para anteriores cumbres "G".
Los líderes religiosos se han reunido, en los pasados siete años, para reflexionar sobre las
agendas mundiales delante de los líderes de las nacionesmás poderosas del mundo y para
ofrecer sus puntos de vista y esperanzas para los encuentros. Nuestras tradiciones religiosas
están informadas por valores profundamente arraigados y ampliamente compartidos para
trabajar por la libertad, la justicia y los derechos humanos.
Como líderes religiosos de distintas tradiciones a través del mundo, afirmamos:


Una necesidad para que el G8 y el G20transformen radicalmente los sistemas
económicos y los supuestos que nos han traído los alarmantes niveles de desigualdad
e inestabilidad económicos.



Una necesidad fundamental para cambiar las prioridades de las naciones del G8 y G20
para avanzar integralmente la seguridad humana, la salud y el bien común.



El rol que el G8 y el G20 tienen para desempeñar en la reevaluación de lasmás amplias
estructuras que nos han traído una vasta desigualdad entre los ricos y los pobres; un
foco de injusticia económica y la consiguiente inestabilidad política que surge de la
diferencia entre ambos en muchos lugares en el mundo.

Justicia Económica
A la luz de la actual crisis económica a través del mundo, nos reunimos para pedir una
cuidadosa gestión y regulación de los sistemasfinancieros mundiales por los cuales los líderes
del G8 y el G20 son en gran parte responsables. Por otra parte, ante la Primavera Árabe y la
agitación política que aparte desgarra gran parte de nuestro mundo, proclamamos una
humanidad compartida y la igualdad de todas las personas.
En vista de la agitación política, volvemos a la importancia dentro de cada una de nuestras
tradiciones paraescuchar a los más vulnerables y para elevar a los oprimidos. El año pasado,
en la 37ª Cumbre del G8 en Deauville, Francia, los líderes del G-8 crearon la Asociación de
Deauville. Como una acumulación de instituciones financieras y políticas que proveen apoyo a

los pueblos y gobiernos del Medio Oriente y el Norte de África, la Asociación de Deauville en
gran parte constituye la respuestapolítica y económica del G-8 a los acontecimientos actuales
en estas áreas.
Por lo tanto:



Instamos a los líderes del G8 y el G20 a continuar trabajando con las personas del
Medio Oriente y el Norte del África para establecer más igualdad y un establecimiento
pacífico del bien común.

La corrupción y la manipulación de las poblaciones, la tierra, y la política son demasiadas
comunes....