Marco teórico sobre la masturbación
Para los investigadores Sierra, Perla y Gutierrez-Quintanilla, la masturbación ha sido, y siguesiendo, una conducta tabú para gran parte de la población, asimismo, señalan que desde la religión judeocristiana fue perseguida durante siglos por separarse del objetivo central de la sexualidad humana, es decir, la procreación. En el siglo XIX, desde posturas pseudocientíficas de la medicina y psiquiatría fue asociada al origen de diversos males del ser humano como la depresión o psicosis delirantes.Adicionalmente, posturas religiosas ortodoxas y distorsiones médicas tiñeron a esta conducta sexual de múltiples connotaciones negativas (Patton, 1986), ocasionando que la masturbación este ligada a sentimientos de culpabilidad sexual (Abramson & Mosher, 1975). Si bien la masturbación fue penalizada desde diversos sectores de influencia, esta no resulta una conducta sexual rara e infrecuente.En ese sentido, Kinsey convulsionó a la tradicional sociedad americana de mediados del siglo pasado, ya que sostuvo que el 92% de los hombres y el 62% de las mujeres se habían masturbado en alguna ocasión, lo que significo un cambio importante en la percepción y concepción de esta conducta, asimismo, el último gran informe acerca de la conducta sexual de los estadounidenses (National Health andSocial Life Survey) sostiene que el 61% de los varones y el 38% de las mujeres se habían masturbado en el último año (Das, 2007)(SIERRA, PERLA, GUTIERREZ-QUINTANILLA, 2010).
En las últimas décadas, las posturas científicas hacia la masturbación fueron evolucionado y desde los años setenta del siglo pasado su práctica es considerada como una herramienta útil en la terapia sexual de algunasdisfunciones sexuales, como la inhibición del deseo sexual o la anorgasmia (Andersen, 1981; Kaplan, 1974; Riley & Riley, 1978; Sierra & Buela-Casal, 2001), asimismo, en la actualidad se plantea el derecho al placer sexual, incluido el autoerotismo, como fuente de bienestar físico, psicológico, intelectual y espiritual (World Association for Sexual Health, 1999)(SIERRA, PERLA &GUTIERREZ-QUINTANILLA, 2010).
Según estudios realizados por José Manuel González, son los hombres quienes presentan una incidencia mayor e inician más temprano sus experiencias con respecto a la masturbación mientras que entre las mujeres la mayor incidencia se da en las solteras. Esta diferencia encuentra su justificación en factores orgánicos, sociológicos y psicológicos. En ese sentido, se tiene que desdeel punto de vista orgánico, las diferencias neuroendocrinas que existen entre el hombre y la mujer pueden ser parte de la explicación y que desde el punto de vista sociológico, es necesario señalar que las pautas culturales de nuestra comunidad son más permisivas ante la masturbación masculina y que las mujeres casadas tienden a satisfacer sus deseos sexuales a través de una actividad socialmentemás aceptada como el coito. El estudio también arroja como resultado que tanto las mujeres solteras y las casadas el coito vaginal les resulta más gratificante que la masturbación(GONZALEZ, 2009).
González señala además que la masturbación forma parte integral de la vida sexual de los estudiantes universitarios solteros y que contrario a lo que se piensa, la masturbación no corresponde...
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