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A los papás, acerca de la hipertensión arterial...

A los papás nos preocupa el futuro de nuestros hijos. Y cada etapa de la vida tiene una preocupación especial. Primero cuidamos que estén sanos, que se alimenten bien, que estén rodeados de cariño y afectos, nos preocupa alejarles todo dolor, molestia, inquietud. Después nos preocupa que aprendan modales, la educación básica mediante elejemplo, que sepan hacer amigos, que comiencen a socializar en el jardín... También –y más tarde- nos interesa su formación humana y la educación formal, los deportes, el modo en que se divierten, y con qué amistades andan. El amor por ellos se manifiesta en el cuidado que ponemos, y si miramos al futuro, nuestra apuesta está en brindarles un desarrollo para hacer de él o de ella una persona adultamadura, sana y plena.
Además de ir tras objetivos positivos, prevemos que no ocurran situaciones negativas. Y en realidad es así... con el bien se contrarresta el mal..., preparándolos para el éxito se alejan del fracaso... proyectándolos para la salud, casi siempre se evita la enfermedad.
Hay enfermedades que pueden ser prevenidas, y es asombroso cómo hacemos habitualmente poco –o nada- en esesentido en un período de la vida de nuestros hijos en que todo acerca de ellos nos preocupa. En gran medida es por falta de información. También porque esas enfermedades nos parecen muy lejanas para ellos. Sin embargo, no pensar en tales afecciones es tan grave como no cumplir el calendario de vacunaciones. El gran número de adultos afectados por la hipertensión arterial nos alerta de que estepequeño, dentro de 20 o 30 años podrá estar en ese número. Y este es un buen momento de prevenirlo.
La hipertensión arterial tiene una parte determinada genéticamente, y no es modificable. También aparece por nuestra forma particular de comer, de trabajar o estudiar, de festejar y de divertirnos, de viajar, de convivir con otros, por la competitividad, las presiones psicosociales, el hábito a adicciones(tabaquismo, alcohol, drogas ilegales) y por el diferente grado de actividad física en nuestra vida cotidiana. Estas, y tantas otras influencias, condicionan la salud a cualquier edad, y no reconocen fronteras de clase social. Hay evidencias de que el riesgo cardiovascular causa más daño en la población con menores recursos e ingresos.
El tipo de alimentación pone en riesgo de hipertensión alos niños con dietas hipercalóricas, con exceso de grasas saturadas y con consumo habitual de bebidas gaseosas. Se exponen cuando en casa se pierde la proporcionalidad de las comidas y se sirven porciones grandes o se repiten platos hipercalóricos, cuando se agrega sal a las comidas presentadas en la mesa, cuando no existe la cantidad adecuada de vegetales y frutas, o cuando se consumenhabitualmente comidas rápidas o snaks.
La alimentación se afecta negativamente si se mira televisión a la hora del almuerzo o de la cena, y también si durante el día se le dedica tiempo excesivo a la pantalla, a los juegos electrónicos o a Internet. Cuando se está pasivamente relajado mucho tiempo frente a la TV, aparece el deseo insensible de comer, masticar algo o beber una gaseosa. Todos los padresdeberíamos saber que mientras nuestros niños miran sitios entretenidos en Internet, están sometidos a publicidad subliminal o explícita que programa consumir alimentos o bebidas desaconsejables para el uso habitual.
El fenómeno que juntos conforman la pantalla y la informática digitalizada son progreso y adelanto con beneficios evidentes, pero así como para bebidas alcohólicas se recomienda “bébasecon moderación”, deberían acompañarse de un “manual de instrucciones para su uso”, pues el desarreglo en destinarles un tiempo excesivo causa desorden y consecuencias indeseables en otros aspectos de la vida. Es comprobado que en los niños genera obesidad, reduce las horas de sueño, disminuye el rendimiento escolar y reduce la cantidad de veces que los niños están presentes en la mesa...