Parto vertical

EL REGRESO DEL PARTO VERTICAL, UN PARTO ANCESTRAL.

Tratando de buscar con el cuerpo el modo más satisfactorio de dar a luz...
“¡Puje!, ¡Puje!, ¡Puje madrecita!, me gritaba doña Rosa, la partera de mi pueblo, allá en Manabí, mientras yo me agarraba de la camisa de Plutarco para que me de más fuerzas. A las cuatro de la madrugada, empecé a sentir como mi Wagnersito ya se me venía, enseguidadesperté a Plutarco para que fuera a ver a doña Rosa, porque yo ya iba a parir. Una tina con agua, unos trapos bien lavaditos y los gloriados de albahaca y hierba luisa estaban listesitos sobre la mesa, alado de mi cama. Pronto llegó doña Rosita y mientras me revisaba me decía que ya venía mi niñito, y que todo dependía de mi voluntad. Ni cinco minutos después de eso, empezaron mis dolores.
¡Nooo!,¡Ayyyyyyy!, ¡Ayyyyyyy, me duele, no puedo!, era lo único que podía decir en ese momento. Doña Rosa me hizo poner de rodillas frente a la cama y empecé a pujar más fuerte, más fuerte y más fuerte. Plutarco me daba de tomar agüita de albahaca para que el bebé saliera más rápido y agüita de hierba luisa para que saliera sin cebo, mientras tanto ya habían mandado a matar una gallina para hacerme uncaldo bien calientito, para recuperar fuerzas, después de la parida. Y así, pasamos Plutarco, doña Rosita y yo hasta las seis y media de la mañana, cuando por primera vez escuché gritar a mi Wagnersito, el primero de mis ocho hijos”.
Parecía que estas anécdotas de alumbramiento solo iba a poder escucharlas de la boca de mi abuela o de alguna otra persona que pasara los setenta años, pues desdeniña me habían enseñado que las mujeres daban a luz acostadas en la camilla de algún hospital o clínica, asistidas por un médico, porque era la forma más segura de garantizar el bienestar de la madre y el bebé.
Hoy, estas extraordinarias historias ya no le pertenecen solo a las mujeres del campo, la selva o los páramos de nuestro país. Ahora en la ciudad, aunque ya no incluye a una partera, havuelto el parto vertical o parto humanizado con el respaldo de la investigación científica que garantiza los verdaderos beneficios para la madre y el bebe.
El hospital Área 16 en Daule, es uno de los primeros establecimientos en Ecuador que está desplazando al parto horizontal o con la boca hacia arriba por el método ancestral del parto vertical o humanizado, en donde la madre se convierte en parteactiva del nacimiento de su hijo y el parto se acorta.
El doctor Alberto León nos explica que el parto vertical consiste en que la paciente adopte ciertas posiciones para mejorar su periodo expulsivo, esto quiere decir que se arrodille o que este semi-sentada en toda la labor de parto. Hacer esto tiene muchos beneficios, por ejemplo, como las mamas están de pie el bebé va hacia abajo con másfacilidad, se aumentan los diámetros en la parte anteroposterior de la cadera y esto ayuda a que el bebé descienda naturalmente, disminuyendo las hemorragias y los dolores en la madre, se emplean menos analgésicos, hay menos desgarros, el trauma es menor y el parto se realiza en menos tiempo. Otro de los beneficios más importante es la parte emocional en la mujer, porque en el alumbramiento también sepuede involucrar el padre, de esta forma ella recibe el apoyo emocional que necesita, así se fortalece el lazo de la pareja al convertirse juntos en padres.
Este proyecto del parto tradicional humanizado en el hospital Área 16 de Daule, pretende ofrecerle a cualquier mujer la opción de elegir libremente la posición del parto, dentro de un ambiente seguro, donde en caso de una emergencia obstétricaexisten las condiciones humanas y herramientas necesarias para evitar secuelas y en el peor caso las muertes maternas y neonatales. La idea de incrementar este servicio es evitar la muerte prematura de los niños y sus madres por falta de atención médica personalizada; además brindar asistencia a las mujeres que muchas veces por diversos factores, no quieren acudir al hospital.
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