Platón y la expulsión de los poetas.

Alumna: Alma Rosa Molotla Ochoa
Profesor: Dr. Gerardo de la Fuente Lora.
Estética I

Platón y la expulsión de lo poetas
La inversión del platonismo

El objetivo de este ensayo es analizar brevemente el proceso y los por qués de la expulsión que hace Platón en la Republica sobre el artista, el poeta y su mimesis, la expulsión y reincorporación del simulacro del que hablará Deleuze. Asípara continuar, se enlazará la explicación de la expulsión con la reincorporación del simulacro, del poeta imitativo, del mentiroso simulador que provoca, como la inversión del platonismo desde Platón mismo, al crear, expulsar y reincorporar el mismo al propio simulacro, al dejar colar de nuevo, por el mismo, al poeta, ahora con la careta de filosofo gobernador, quien será el nuevo portador denobles mentiras, por salud y cohesión de la cuidad. Es decir, se trata también es este ensayo de un esfuerzo por construir una interpretación de lo que es el simulacro en “Simulacro y filosofía antigua” de Deleuze y poder explicar la expulsión del mismo.

Republica III y X
Bien, comenzaré explicando lo constante concerniente a los libros III y X de la Republica de Platón y el por qué de laexpulsión de los poetas de la ciudad, cuyo objetivo será ver como es que dentro de la construcción de Platón y su ciudad ideal, no tendrán cabida los artistas imitativos, todos aquellos que hagan mimesis y que puedan representar o asimilar tanto de aspecto como de habla no sólo a si mismos, sino a cualquier otro oficio; Dioses, animales o cosas, por lo que deberán ser expulsados de la ciudad pues ponen enriesgo su orden político fundado en la razón y no en las narraciones míticas de los poetas tradicionales que sólo imitan verdades, quienes mienten e incitan a mentir.
“En la cuidad platónica todo hombre tiene asignado un lugar, un espacio determinado y definido. Si es zapatero, o medico, o negociante, es esencial, definitiva y decisivamente ese papel, y nada más que ese papel. Si algo repugna aesa visión platónica de la cuidad es la figura proteica de un individuo que encarna múltiples actividades y oficios.”

Así, en Republica III, el artista expulsado será el poeta imitativo, presentado como aquel que desarrolla su narraciones a través de la mimesis y cuyo potencial es poder reproducir o imitarlo todo, capacidad con la que transgrede y atenta contra un orden ya preestablecido dela ciudad que indica que cada uno de sus miembros está ya asignado para practicar bien un solo oficio, no muchos, no todos, sólo uno, al que deberá limitarse y dedicarse todo hombre de bien, si no quiere ser expulsado.
“ Parece pues, que, si un hombre capacitado por su inteligencia para adoptar cualquier forma e imitar todas las cosas, llegara a nuestra ciudad con intensión de exhibirse con suspoema, caeríamos de rodillas ante el como ante un ser divino, admirable y seductor, pero, indicándole que ni existe entre nosotros hombres como el ni está permitido que existan, lo reexpediríamos con destino a otra ciudad,[…] por lo que a nosotros toca, nos contentaremos, por nuestro bien, con escuchar a otro poeta o fabulista mas austero, aunque menos agradable, que no nos imitara mas lo que dicenlos hombres de bien[…].”(Republica 398 a)

De este modo el poeta deberá acotarse al hombre de bien si no quiere ser expulsado, estos poetas serán los gobernantes filósofos, quienes fungirán como los nuevos forjadores de mitos, como mentiras nobles, útiles, medicinales y permitidas.

“[…]la mentira es algo que , aunque de nada sirve a los dioses, puede ser útil para los hombres a manera demedicamento, está claro que una semejante droga deber quedar reservada a los médicos sin que los particulares puedan tocarla[…] alguien a quien le sea licito faltar a la verdad, serán los gobernantes de la ciudad, que podrán mentir con respecto a sus enemigos o conciudadanos en beneficio de la comunidad sin que ninguna otra persona esté autorizada a hacerlo.”(Republica 389 b-c)

Ya en Republica...