reserva dourados

En Las últimas semanas, además del fútbol de siempre, dos temas ocuparan los noticieros: el juicio del conocido “mensalão” y, en San Pablo, el programa del combate a homofobia. Casininguna importancia fue dada al testamento de una tribu indígena.
La justicia federal declaro la expulsión de 170 indios de la tierra que viven actualmente. Están en Iguatemi, MatoGrosso do Sul, en las bordas del Río Hovy. Eso con el silencio casi absoluto de las noticias. Hace dos semanas en una dramática carta-testamento los Kaiowá-Guarani informan:
“No tenemos y nivamos a tener perspectiva de vida digna y justa, sea acá en la borda del río, sea lejos de acá. Concluimos que vamos a morir todos. Estamos sin asistencia, aislados, cercados de hombresarmados y resistimos hasta hoy. Comemos una vez al día!
Pedimos al Gobierno y a la Justicia Federal para que no decreten la orden de desalojo/expulsión, pero que decrete nuestra muertecolectiva y que nos enterré acá. Se ruega que decreten nuestra extinción, además que envíen varios tractores para cavar huecos donde echen nuestros cuerpos. Este es lo que pedimos a losjueces federales.”
Entre 1986 e septiembre de 1999, 308 indios habían suicidado. Los suicidios son una consecuencia por vivieren confinados en reservas cada vez menores, rodeados porpistoleros o ganaderos que actúan como tales. El suicidio porque tornarse mendigo o prostituta es casi siempre el camino para quien deja la reserva.
Según el Conselho Indigenista, elíndice de asesinatos en la Reserva de Dourados es de 145 habitantes a cada 100mil. En Irak, ese índice es de 93 personas en cada 100 mil. Desde 1999 otros 555 jóvenes Kaiowá/Guaranisuicidaran en Mato Grosso do Sul. Sob el aterrador y casi absoluto silencio. Silencio de los gobiernos y de los medios de comunicación. Un silencio cómplice de esa tragedia.