san agustín

SIERRA RUBIO, Santiago, La Biblia: el manjar de Dios, Madrid, 2003, FAE, 16 págs.
RESUMEN: Juan Carlos Maldonado

Cuando nos acercamos a la Biblia, la finalidad es alimentar nuestra vida de creyentes, y no tanto crecer en ciencia. Para san Agustín la Biblia es un medio dado por Dios para nuestra perfección, por lo cual no es un libro selectivo; como escritor y como director de almas no secansó de repetir la invitación a estudiar la Biblia. Con esto se tiene que, ninguno de los escritores cristianos de la antigüedad ha contribuido tanto como Agustín al progreso y la profundización de la palabra revelada.
Agustín buscó ahondar en el verdadero sentido bíblico y vio la Biblia como la palabra de Dios revelada y liberadora. Él es un hombre de su tiempo y no se puede enjuiciar su culturabíblica con los criterios modernos; muchas de sus interpretaciones hoy son descartables; no obstante su contribución al progreso de la exégesis fue positiva, sobre todo con la obra La doctrina cristiana, la primera introducción sistemática a la Sagrada Escritura.

I-. LA ESCRITURA EN LA EXPERIENCIA DE AGUSTÍN. En el primer encuentro de Agustín con la Biblia se sintió desilusionado por el estilopoco brillante que tenía el texto. En su propia experiencia, ha aprendido que es necesario acercarse a la Escritura con humildad, mansedumbre. El encuentro con las cartas de san Pablo en vísperas de su conversión, es un encuentro de luz que le ayuda a resolver el problema del escepticismo y del naturalismo.
Al poco tiempo de su ordenación sacerdotal, en el 391, escribe una carta confidencial a suobispo Valerio pidiendo unos meses de preparación, sobre todo leyendo, meditando y estudiando las Sagradas Escrituras; cuando propone esto (el estudio más a fondo de la Escritura) lo que intenta conseguir se puede resumir en tres objetivos: colmar las exigencias personales, doctrinales y pastorales.

II-. EXCELENCIA Y PROFUNDIDAD DE LA ESCRITURA. Agustín considera la Biblia como la expresiónde la voluntad y la inteligencia de Dios; la Escritura no es un libro de historia, sino una oferta divina que se brinda al hombre de fe para descubrirle lo que Dios le pide en cada momento y qué es lo que tiene que hacer para agradarle.
La Palabra de Dios, cuando es leída en un contexto eclesial, es según, Agustín, como un manuscrito de Dios donde se encuentran narradas todas las promesas delSeñor, la Biblia es verdad porque viene de Dios. San Agustín realza el factor divino porque pretende poner de relieve la autoridad de la Biblia, pero a la vez no se olvida del factor humano. Nos dice que cada página de la Escritura está llena de enseñanzas en torno a Cristo y a la Iglesia. Agustín hizo de la Escritura el alimento de su vida cotidiana, y fue capaz de repartirla también como pan a supueblo.

III-. LA ESCRITURA, FUENTE DE ALEGRÍA Y MAESTRA DE VIRTUD. Para Agustín, entender la Escritura es comenzar a disfrutar de la verdadera alegría del Espíritu, las delicias de la Escritura no se pueden comparar con ninguna otra delicia, es más las otras no proporcionan verdadera alegría al espíritu. Para Agustín el estudio de la Biblia es fuente de consolación y medio adecuado para reavivarlas virtudes teologales; por ello comprender la Biblia está conectado con la vida ordenada. Y el estudio de la Biblia pone al hombre siempre delante del modelo que es Cristo y le lleva a un continuo examinarse a la luz de la palabra.

IV-. LA BIBLIA, MEDICINA, ALIMENTO Y LUZ. La razón de esto es que en la Escritura se deja encontrar Cristo como salvador de nuestra vida. La Escritura es alimentocapaz de quitar toda hambre y de saciar sin cansar, y es que la Escritura para Agustín es como los pastos de alimentos seguros para todos los hombres.
De lo que se trata es de alimentar nuestra vida espiritual, y según Agustín, la Escritura proporciona alimento para vivir la vida cristiana y saciar nuestra inteligencia, pero a la vez se dan normas para cumplir con los mandatos, y cuando hay...