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Santo Niño de la Salud




Plan Parroquial de Pastoral 2012





«Que nos amemos los unos a los otros … para que seamos uno, como Tú y el Padre son uno … y así el mundo crea»






Presentación

Amar a Dios con todo el corazón, con toda el alma, con toda nuestra mente y con todas nuestras fuerzas y al prójimo como a uno mismo; es condición indispensable para alcanzar lasalvación y con ello la vida eterna que Dios, por medio de su Hijo en la acción del Espíritu Santo, ha dispuesto para el género humano. El amor de Dios por nosotros no sólo es inmenso, sino además es constante, por ello suscita ocasiones y oportunidades a lo largo de nuestra existencia para que podamos encontrarnos con Él, Bondad Infinita y Fin Último de cada uno de nosotros. Por amor nos hacreado, por amor nos conserva y por amor nos redime. Al mismo tiempo, es por amor que nos concede la libertad y con ello, la posibilidad de elegir el bien o el mal. Corresponde a nosotros entonces, el hacer buen uso de tal libertad, y para esto será necesario contar con los elementos adecuados para formar correctamente nuestra conciencia y no dejarnos deslumbrar por falsas bondades, sino elegir el Bienverdadero y la Felicidad auténtica. Pensar por lo tanto, no en beneficios terrenos y temporales, más bien en aquello que no pasa, no termina y es eterno. Tener conciencia de que todo lo que hacemos aquí en la tierra tiene su eco en la eternidad y por lo tanto, perder el tiempo es perder la eternidad. Ciertamente, la motivación no será la obtención de premios o el temor a castigos, sino el amor.Dicha manera de vivir y de actuar no se comprende si no se tiene un sentido sobrenatural de las cosas, y este sentido sólo se adquiere y renueva en el encuentro con Dios y el trato frecuente con Él.
El presente Plan de Pastoral pretende iniciar una etapa nueva, viendo hacia los orígenes de la misma vida de la Iglesia, donde el centro de sus vidas era el Amor, es decir: Jesús de Nazaret. Esta mismaIglesia de Cristo, que desataba la maravilla en los demás por el testimonio de fe verdadera que les llevaba a vivir a todos como hermanos, hijos todos de un mismo Padre, Dios nuestro Señor. Ante este testimonio las demás personas manifestaban su asombro exclamando: ¡y mira cuanto se aman! De este hecho derivaban muchas de las conversiones. La palabra más elocuente al evangelizar sería, entonces,la misma vida del cristiano, la vida en amistad con Dios, la vida de santidad, la imitación de ese Emmanuel (Dios con nosotros): sean santos como su Padre celestial es santo. La santidad de vida es pues un objetivo que debe de estar presente en el cristiano, como búsqueda de Dios, como imitación de Cristo, como práctica del amor de Dios con el prójimo. De ahí, la necesidad de trabajarprimeramente en redescubrir el fin y los objetivos de todo nuestro hacer y actuar como cristianos, donde la urgencia será vivir con aquél sentido de fe y amor que caracterizó a la Iglesia primitiva y que tanto interés despertó en los hombres. Por tal motivo, este año comenzaremos con los cimientos, esto es, creando y renovando el ambiente al interno de la comunidad parroquial, así como en su formacióndoctrinal y espiritual; de tal forma, que teniendo fortalecida la unidad, con la conciencia de la necesidad de la práctica de la caridad y de la exigencia de una vida de santidad, conociendo verdaderamente la Palabra de Dios y las verdades de nuestra fe católica, podamos brindar lo necesario para que practicantes o no practicantes; creyentes o no creyentes, puedan encontrar en nuestra comunidadparroquial al Dios vivo y verdadero presente en cada uno de nosotros. De esta forma, podamos ser verdaderamente luz y esperanza, fermento y consuelo, presencia de Dios y manifestación de su amor en nuestra sociedad humana; y así podamos cumplir con nuestra misión: reconducirlo todo a nuestro Padre Dios. María Santísima, Sede de la Sabiduría sea nuestro amparo y fortaleza para poder llevar a cabo este...