Ya no seas codependiente

Introducción:
Melody Beattie nos comparte sus experiencias y escribe para nosotros un libro muy interesante que trata de dar las pautas para que el lector comience a reflexionar sobre la posible codependencia que puede llegar a tener, en especial en relación a los casos que nos cuenta. La autora había tenido contacto con personas codependientes pero como bien nos introduce al tema, suexperiencia en un principio fue por medio de los dependientes a sustancias químicas, empezó a preguntarse qué pasa con las personas que conviven con estos dependientes, trata de descubrir que hay con la codependencia. Se da cuenta que los tratamientos sólo se enfocaban en estos sujetos dependientes a sustancias y no a las que se les puede llamar víctimas que como menciona el sufrimiento se da en familiaante este fenómeno.
En este texto explico un poco lo que la autora nos menciona y ejemplifico. He tenido la oportunidad de conocer casos de codependencia y eso me permite contribuir en el tema y la ejemplificación, incluyendo la codependencia mínima.
Podría inferirse que la codependencia viene ligada a la dependencia del otro con el que se convive a una sustancia química, pero la verdad es que nosiempre, también existe la codependencia en distintos ámbitos, lo que se puede asegurar es que se da en mayo medida en familias. No debemos dejar atrás que incluso la codependencia se puede dar en jóvenes, y es que la búsqueda de la identidad puede llegar a introducirlos en una codependencia, las relaciones afectivas que sostienen con otros jóvenes también les puede generar codependencia.YA NO SEAS CODEPENDIENTE
Cómo dejar de controlar a los demás y empezar a ocuparse de uno mismo.
La autora nos plantea muchos casos de codependencia, principalmente proveniente de parejas en las cuales uno de ellos es dependiente a sustancias químicas, por ejemplo el caso de Jessica que se le da ese nombre por cubrir su identidad. Jessica vive con un marido alcohólico, su vida transcurre enlas necesidades de sus hijos y de su esposo. La mujer va generando una codependencia que la lleva a creer que era un cero a la izquierda, nadie le hacía caso, tenía que tener relaciones con su marido cuando él quisiera, aunque Jessica no quisiera. Los días pasaban y para la señora era un martirio, ella ya había echo mucho, era lo que pensaba. Cuando se le sugirió que fuera a una terapia pensó lomismo, decía yo ya hice mucho por él, ahora le toca a él cambiar, pero seguía acumulando ira.
En este caso nos dice la autora:
1) Que no estaba loca: era codependiente. El alcoholismo y otros trastornos compulsivos son verdaderas enfermedades familiares. La manera en que la enfermedad afecta a otros miembros de la familia se llama codependencia.
2) Que una vez que han sido afectados –una vezque está se asienta– la codependencia cobra vida propia.
Es similar a pescar pulmonía o a tomar algún hábito destructivo. Una vez que te hiciste de él, ya lo hiciste.
3) Si deseas deshacerte de ella, eres tú quien tiene que hacer algo para lograr que se vaya. No importa de quién sea la culpa. Tu codependencia se convierte en un problema tuyo y resolver tus problemas es tu responsabilidad.
Sieres codependiente, necesitas encontrar tu propio proceso curativo o de recuperación. Para empezar esa recuperación, es útil comprender qué es la codependencia y ciertas actitudes, sentimientos y conductas para entender qué podemos esperar mientras se están dando estos cambios.
Este libro buscará ese entendimiento y alentará dichos cambios. Me alegra decir que la historia de Jessica tuvo un finalfeliz y un nuevo principio. Se mejoró. Empezó a vivir su propia vida. Espero que tú también lo hagas.
Los pacientes que buscan ayuda en clínicas de salud mental o encargadas de tratar dependencias químicas no son las únicas personas que sufren de codependencia. Randell era un consejero en dependencias químicas y un alcohólico en recuperación que llevaba varios años de sobriedad cuando se encontró...