Deporte: la importancia de unos objetivos bien definidos

Las personas disponemos de una gran cantidad de energía, pero se trata de no malgastarla en esfuerzos inútiles, sino concentrarla en aquellos pasos que nos van a llevar a hacia aquello que queremos.Los objetivos son las guías de nuestro esfuerzo, una vez los definimos y los deseamos, nuestra actividad va hacia ellos y podemos reconducirnos cuando nos damos cuenta que nos estamos alejando.Los objetivos han de ser exigentes y a la vez posibles porque las personas disfrutamos más y estamos más motivadas cuando nos marcamos unas metas que están “casi” en nuestras manos. Si nuestrosobjetivos no nos exigen esfuerzo y por tanto no hay reto, nos sentimos aburridos, desmotivados, pero por otro lado, los objetivos muy grandes pueden provocar un efecto paralizador, ya que nuestro cuerpo seencuentra sin recursos y nos sentimos amenazados. La amenaza es una mala compañera, es mucho más recomendable buscar un reto.
Otro aspecto básico en los objetivos es que dependan de nosotros mismos,los llamamos objetivos de rendimiento, para contraponerlos a los objetivos de resultado. Un objetivo de rendimiento puede ser estar atento a la señal de salida o ejecutar correctamente la técnica,mejorar el estilo, cambiar de ritmo… En cambio, ganar la competición o conseguir un lugar determinado es un objetivo de resultado que no depende exclusivamente de nosotros, ya que entran factores queestán fuera de nuestro control como la suerte o el comportamiento de los demás. Está claro que cuando hablamos de deporte, la competición aparece como un factor casi intrínseco y que nos hace ilusiónganar, pero cuando nuestro objetivo es simplemente este, empezamos a centrar la atención en aspectos que no podemos controlar y esto nos hace sentir más inseguros. En cambio, si hemos definido unosobjetivos de ejecución, podemos centrarnos en nosotros mismos y en los que tenemos que hacer para progresar en cada momento. Esto nos permite sentirnos con más poder sobre la situación, estar más...