El labrador

Mientras te ríes refuerzas tu falsa apariencia de superación, mientras se ríe aumentan las rejas de tu prisión.

Es hora de que expulsemos lo que está detrás de nuestros escudos, de que derribes lamuralla antes de que se haya vuelto tan grande como para impedirnos que el calor del sol nos toque.

Eres pequeño de todas formas, muy pequeño, casi tanto como el resto. Te reconocerás así o laacumulación de cáscaras aniquilará tu verdadera y única pequeñez.

Refuerzas la puerta de tu casa en un pueblo donde tú eres el único ladrón, ladrón de la libertad que tu familia necesita al despertar.El río estaba allí, llegaste y pusiste una represa creyendo que podías obtener más provecho del agua del que esta ya te daba. Ahora la corriente creció demasiado, antes de que te hayas dado cuentade que había que abrir las compuertas. Te están quedando las últimas posibilidades antes de que suceda lo que tu precoz ambición puede llegar a causar: la pérdida en el ahogo o en la sequía.

¿Adónde vas? ¿Piensas llegar a un logro así? Detente, mira, escucha, dilo. La posibilidad no está en el tiempo, está en el instante en que respiras cuando abres los ojos y sabes que te engañas pensando quellegarás a la meta de una carrera que desconoces. El tiempo corre y no empezaste, terminaste, llegaste, cumpliste, mereciste, quisiste. El tiempo avanza y ya no resistes, ya no sabes si te persigue otu a el.

Creyéndonos reyes del reino animal caímos en la esclavitud de los dioses que adoramos, fluctuamos entre la locura y la cordura que algunas palabras de nuestra comunicación definieron ytenemos el miedo que un insecto nunca tuvo.

Los días pasan y todavía no eres, el transcurso te consume y todavía no logras desprenderte de las elaboradas corazas que creaste, un nuevo día te llama ytodavía sigues atrás. ¡Adelante!, muéstrate, no serás más pequeño de lo que ya eres, estarás viviendo la vida que en esencia te pertenece y que corre dentro de ti, verás como empiezas a moverte y...