Estudiante.

El eterno enemigo…

Basta de andar siguiendo las dinámicas que el bombardeo mediático nos presenta e infunde en las mentes, gracias al mismo es que al hablar sobre un grupo alzado en armas andamossatanizando y generando un sectarismo infundado en la nada, en la simple des información e ignorancia en la que los medios masivos juegan un papel importante al verse éstos concentrados en manos deunos pocos que regulan lo mostrado a través de” la caja mágica” y los diarios que en tiempos en que “nos mean dicen ‘llueve’”. La mirada al panorama que vive el país nos la limitan, todo apunta a dondelos gobiernos de turno lo deciden haciendo de la información una espectacularización monopolizada y con marcados intereses. La paz no se trata de acabar TAN SOLO con un cese al fuego intercambiadoentre el estado colombiano y los grupos guerrilleros, hay de trasfondo toda una compleja red que convierten de éste país en ruinas una vasija a medio llenar de la que el que tiene posibilidad mete lamano y se lleva lo que puede, todo esto en las narices de un pueblo sin memoria convencido por las dinámicas de esa democracia que dice ser un “gobierno en el que el pueblo ejerce soberanía eligiendo asus dirigentes”, dirigentes todos pertenecientes a familias que desconocen las condiciones reales de la calidad de vida de quienes habitan en este territorio ultrajado por mucho tiempo a manos de laexplotación multinacional.
Concuerdo con la autora, por supuesto, habrá que cantar siempre en los tiempos difíciles, es cuando más se necesita levantar una voz que por mucho tiempo ha sido acalladapor esa mayoría, que nos venden la idea desde siempre, es la supuesta poseedora de la razón, aquella que cree con su voto vela por los intereses de una comunidad en colectivo, pero me pregunto ysiempre me seguiré preguntando ¿cómo es eso posible? ¿Acaso se dan en algún momento el espacio para empaparse de los temas que nos incumben a todos y así en realidad “ejercer soberanía”? Los resultados...