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El muchacho se llamaba Tomas. Tenía diecisiete años y cursaba cuarto año medio. Pasaba la mayor parte del tiempo en la oficina del rector consecuencia de su indisciplina y susprofesores no lo toleraban. Sus padres no le prestaban mucha importancia ya que lo consideraban un inadaptado, y simplemente se conformaban con que no callera en prisión. Pero Tomasno era un antisocial, no correspondía a la clase de delincuente juvenil, el sencillamente no le daba mucha importancia a lo que acontecía a su alrededor y solo se dedicaba arealizar su meta en esta vida: Ser Feliz.
En el ámbito académico nunca tuvo problemas, parece irónico, pero esta era la razón por la que sus profesores no lo toleraban. Ellossimplemente no soportaban que este muchacho que jamás presto atención en sus clases, siempre obtuviera las mejores calificaciones. Su director en cambio, le irritaba el poder deconvencimiento que poseía el chico. Por decirlo de una manera, Tomas nació para mentir y convencer. Así es, este joven era capaz de vender desierto a los árabes o un iglú a losesquimales. Por esta razón en su colegio se le odiaba o, por contrario, se le amaba. La mayor parte de los alumnos, de su escuela, no soportaban la manera en que Tomas, siempreencontraba la forma de salirse con la suya. Solo unos pocos consideraban a Tomas como un héroe o simplemente sentían un grado de admiración hacia él.
Físicamente Tomas no llamaba muchola atención. No era muy alto, su cuerpo se veía bien tonificado, como si se tratase de un deportista, pero Tomas jamás hacia ejercicio. Su pelo tenía un tono claro y era lacio,pero no se apreciaba demasiado porque nunca se lo peinaba. Poseía unos ojos grandes de un tono café muy penetrantes, que con solo una mirada podía revelar lo que estabas pensando.