Historia de la violencia de los cincuenta
Los que estudiábamos nos quedábamos en una casa muy grande y bonita que tenía mi papá en el pueblo, nos cuidaba la tía Eudosia hermana de mi madre, muy cariñosa y nos tenía todo al día la ropa , la comida y la casa siempre muy ordenada, ella vivía en nuestra casacon su esposo y sus dos hijos, también vivía con nosotros otra tia hermana de mi padre ella era soltera y bastante malgeniada mis hermanos siempre fueron muy perezosos para el estudio y por eso se ganaron muchas muendas, por supuesto de mi padre .
Mi padre estaba siempre atento que no nos faltara nada, yo lo admiraba mucho porque era muy responsable nunca tomaba, ni fumaba, amaba demasiado ami madre, pero nunca la dejaba salir sola de la finca era demasiado celoso solo podía salir con él y a los sitios que él visitaba, no permitía que los obreros de la finca la miraran a la cara, ella tenía que pasarles la comida estirando el brazo por la puerta del comedor sin voltear a mirar a los obreros – mi abuela sonreía recordando este hecho-.Mi madre permanecía en la casa de la fincarealizando los oficios de la casa, el que mandaba en todo era mi padre, él tomaba todas las decisiones, pues en esa época las mujeres teníamos pocos derechos, inclusive nunca supe de cual familia venia mi madre si de liberales o conservadores, el hecho era de que mi padre era liberal y por lo tanto mi madre debía ser liberal, ni parecido al tiempo actual. Me acuerdo de las navidades y el año nuevo -Comenta la abuela con nostalgia y para un poco su relato porque se le aguaron los ojos-, eran especiales se preparaban platos muy deliciosos, el pavo nunca faltaba, hacían envueltos de mazorca, tortas, la cena de media noche, siempre invitaban a los vecinos y eran atendidos con agrado y se les compartían todas esas delicias.
Mi padre daba la vida por sus hijas ,como yo era la mayorcita, siempre mellevaba con él a comprar las cosas para la casa del pueblo y para la finca, por eso aprendí mucho de él a negociar y a escoger la mejor calidad de los productos, también recuerdo que siempre llevaba a mi hermana menor cargada en los hombros y cuando se sentaba a charlar con sus amigos la sentaba en sus piernas, siempre cuidándola mucho para que no le pasara nada; a mi madre le compraba los...
Regístrate para leer el documento completo.