la logica
2. Zygmunt Bauman.
Finalmente, recordemos que el poder del sentido común sobre la manera en que entendemos el mundo y nos entendemos a nosotros mismos (la inmunidad del sentido común frente al cuestionamiento, su capacidad para la autoconfirmación) depende de la índole aparentemente autoevidente de sus preceptos. Esto descansa, a su vez, en la naturaleza rutinariay monótona de la vida cotidiana, que informa nuestro sentido común y es al mismo tiempo informada por él. Mientras realicemos los movimientos habituales y rutinarios que constituyen la mayor parte de nuestra vida cotidiana, no necesitamos demasiado autoexamen ni autoanálisis. Cuando se las repite mucho, las cosas se tornan familiares, y las cosas familiares son autoexplicativas; no presentanproblemas ni despiertan curiosidad. En cierto modo, son invisibles. No se formulan preguntas porque las personas aceptan que "las cosas son como son", "las personas son como son" y afortunadamente poco se puede hacer al respecto. La familiaridad es enemiga acérrima de la curiosidad y la crítica y, por ende, de la innovación y el coraje de cambiar. En la confrontación con ese mundo familiar regido porhábitos y por creencias que se realimentan recíprocamente, la sociología actúa como un intruso a menudo irritante. Perturba nuestra agradablemente tranquila forma de vida haciendo preguntas que nadie, entre los "lugareños", recuerda haber oído -y mucho menos respondido- nunca. Esas preguntas transforman las cosas evidentes en rompecabezas: desfamiliarizan lo familiar. De pronto la forma de vidahabitual es puesta en tela de juicio; y desde ese momento parece ser sólo una de las formas de vida posibles, no la "natural" y tampoco la única.
El cuestionamiento y la perturbación de la rutina no son del agrado de todo el mundo; muchas rechazan el desafío de la desfamiliarización porque requiere un análisis racional de las cosas que hasta entonces "funcionaban solas". (Podríamos traer acolación el cuento de Kipling sobre aquel ciempiés que caminaba ágilmente con sus cien patas hasta que un cortesano adulador empezó a elogiarlo por su excelente memoria, que le permitía no apoyar la pata número treinta y siete antes de la ochenta y cinco, o la cincuenta y dos antes de la diecinueve. La súbita y brutal toma de conciencia le provocó una gran timidez al desdichado ciempiés que no pudocaminar nunca más). Algunos se sienten humillados: aquello que conocían y de lo que estaban orgullosos ha sido devaluado, quizá hasta desvalorizado y ridiculizado; y eso constituye un choque que a nadie le gusta. Pero, pese a lo comprensible que pueda ser el rechazo, la desfamiliarización tiene sus ventajas. La más importante es que ofrece nuevas e insospechadas posibilidades de vivir la propia vidacon mas autoconciencia, más comprensión y hasta, quizá, con más libertad y control.
Para todos aquellos que creen vivir la vida de una manera consciente vale el esfuerzo, la sociología puede llegar a ser una gran ayuda. Si bien mantiene con él un diálogo intimo y permanente, la sociología aspira a superar las limitaciones del sentido común , trata de abrir las posibilidades que éste tiende...
Regístrate para leer el documento completo.